Las fichas de los jugadores eran inasumibles para los asturianos
04 sep 2023 . Actualizado a las 21:42 h.El último día de mercado, o deadline day, como han popularizado desde Inglaterra, es aquel en el que más transferencias terminan por cerrarse de todo el largo verano. Circunstancia circular, pues a más fichajes que se dan, los equipos buscan cubrir esas salidas con nuevas entradas. Un contexto en el que el Real Sporting de Gijón, a pesar de tener un objetivo claro y marcado con la contratación de un '9', no terminó de sellar ninguna operación tras largas horas en las oficinas de Mareo. Clubes y agentes, conscientes de que esta situación se alargaba y de la necesidad de firmar, llamaron a la puerta del Sporting, pero no todo valía, al igual que no todo era accesible económicamente, como los casos de Shon Weissman y Gonçalo Paciência.
Weissman, que firmó en propiedad con el Granada tras el ascenso del conjunto nazarí, donde había llegado en calidad de cedido el curso pasado procedente del Real Valladolid, finalmente no encontró acomodo y se quedó en el conjunto andaluz, siendo inscrito en las últimas horas del mercado. Paciência tuvo mejor «suerte», pero teniendo que encontrar su sitio en el mercado internacional al salir como cedido rumbo al Bochum alemán, equipo de la máxima categoría. Ambas alternativas sí contaban con una valoración positiva por parte del área de gestión deportiva en términos de potencial rendimiento, pero desde un primer momento las cuentas no salían. El Sporting no podía asumir el coste de dos fichas muy elevadas para la categoría, con emolumentos de Primera, por encima de los de la plantilla rojiblanca, y con un margen escaso de negociación para dos futbolistas que vendrían como cedidos. Además de un límite salarial ya ajustado, con hasta 25 contratos del primer equipo firmados.
La intrahistoria de ese 1 de septiembre giró en torno a los nombres de Jon Karrikaburu, complicado por su pretensión de terminar en Primera División, como terminó sucediendo, Borja Garcés y Miguel de la Fuente. El primero terminó en el Alavés, desbloqueando las salidas de Mahmadou Sylla, rumbo al Valladolid, y del propio de la Fuente, que acabaría firmando nuevamente por el Leganés. Garcés, por su parte, también acabaría en Segunda, en su caso en el recién descendido Elche. Una marejada de movimientos en la que estaba envuelto el Sporting y que terminó sin el anuncio esperado de un nuevo delantero centro.
Tal y como comentó el técnico rojiblanco, Miguel Ángel Ramírez, ese mismo día en la rueda de prensa previa al encuentro del fin de semana frente al Burgos, el Sporting estaba pendiente de movimientos que no dependían directamente de ellos sino de que terceros fueran cerrando sus fichajes para que las fichas de dominó fueran cayendo en una serie de fichajes de delanteros que se movieron entre Primera y Segunda división con el Sporting entre los interesados. Aunque finalmente se quedó sin su trozo de pastel.
En esas horas de tensión y negociaciones, la lista de ofrecimientos, como es habitual en estos días de cierre de mercado, era muy amplia. Algunas opciones se descartaron al no encajar con lo que se buscaba, algo que el propio David Guerra, presidente ejecutivo del club, reconocía pasada la medianoche con el tiempo para firmar un traspaso ya superado: «Hemos mirado otras alternativas, pero no estábamos conformes con el nivel que queríamos para el equipo». No era el caso de estos dos jugadores, pero tras no lograr el objetivo principal, la vista viró hacia las posibilidades como futbolistas libres de un centrocampista, para lo que el nombre de Roque Mesa ha ido ganando enteros y avanzando en conversaciones y negociaciones en las últimas horas.
Directo sobre el cierre del mercado
A partir de las 21:50 horas habrá un directo en Twitch repasando las claves del último día del mercado de fichajes del Real Sporting de Gijón. Podrá seguirse también en la web de Sporting1905 a través de un post.