El Sporting hace hueco para el fichaje del delantero con la salida de Milovanovic y la venta de Varane
SPORTING 1905
Próximos movimientos del mercado rojiblanco
02 ago 2024 . Actualizado a las 23:07 h.En una semana en la que la operación salida ha centrado los avances en el mercado del Real Sporting de Gijón, la dirección deportiva afronta ahora los siguientes pasos a dar con un mayor margen de maniobra. Por un lado, en cuanto a la cantidad de efectivos en nómina, dando salida a uno de los delanteros, Uros Milovanovic, posición que el club prioriza reforzar este verano. Por otro, también en lo económico, sobre todo a raíz de la venta de Jonathan Varane, a la que le restan horas para hacerse oficial.
Especialmente la salida del francés hacia el QPR, en una operación cercana al millón y medio de euros, es la que permitirá un buen plus en sentido económico, siendo un futbolista que no era imprescindible en la hoja de ruta rojiblanca. Por su parte, ya se cuenta con el espacio en la delantera dejado oficialmente por Milovanovic. El centrocampista de 22 años contó con luz verde para viajar a Londres una vez el papeleo ya estuvo en orden. El centrocampista se someterá a las pertinentes pruebas médicas y firmará su nuevo contrato para así terminar de oficializar la operación de venta.
La salida de Uros Milovanovic, que no contaba para el nuevo proyecto dirigido por Rubén Albés de cara a la 24/25 deja la delantera con dos futbolistas de un perfil muy diferente, representados por Jordy Caicedo y Víctor Campuzano. Junto a ellos figuran otros dos nombres, también con pocas semejanzas, llamados a ocupar el sector diestro del ataque, aunque puedan jugar también por dentro en sistemas que formen con dos puntas, una alternativa también habitual en el técnico vigués. Se trata de Juan Otero y Jonathan Dubasin.
4 efectivos que permiten doblar posiciones junto a Gaspar Campos y Dani Queipo para completar, a día de hoy, la línea ofensiva. Sin embargo, es en esta parcela en la que la dirección deportiva se muestra más decidida a focalizar sus esfuerzos, especialmente en el plano económico. Es su gran apuesta en lo que queda de mercado. El gol cotiza caro, además de las dificultades añadidas de encontrarlo o «garantizarlo» en una categoría como la Segunda División, pero se busca poner la guinda con un fichaje más que añada un grado de competencia a los efectivos actuales y que aspire a aportar de cara a portería, evitando la sensación de los últimos años de ir escasos en esa faceta.
«No será una cuestión individual», como recalcaba David Guerra, presidente ejecutivo del club, en su última comparecencia pública. Es cierto, el gol del Sporting no dependerá sólo del delantero que venga. Sin embargo, se considera en el seno de Mareo que resulta necesario incorporar algo más en el mercado para dicha demarcación, contando, entre otras cosas, con que un Caicedo que aspira a pelear la titularidad se perderá casi con total seguridad varios compromisos de liga por sus convocatorias internacionales con Ecuador (este año habrá cinco ventanas FIFA) o los recurrentes problemas de lesiones de otra de las piezas de la punta del ataque como Campuzano, con riesgo de reincidir. En caso de que las cosas no vayan bien en algunos tramos de la temporada el Sporting podría verse muy justo de efectivos en una zona clave en las aspiraciones rojiblancas si no se consigue reforzar adecuadamente.
No es lo único que se busca. Un futbolista creativo, con las características que tenía un polivalente Sergio Bermejo que estaba pensado para jugar en posiciones interiores, además de un jugador que refuerce la línea defensiva sirviendo para el lateral diestro y el centro de la zaga, con Miguel Loureiro como nombre destacado en la agenda, son otras incorporaciones importantes a acometer. Del mismo modo, la salida de Varane también abre una necesidad más en el centro del campo que estaba cubierta con él. Un mes de agosto por delante en el mercado para ir cerrando todas estas operaciones una vez el Sporting ha dado varios pasos adelante en la operación salida. Apenas Axel Bamba es el último descarte por cerrar. Todo dependerá de cómo se vayan desarrollando los acontecimientos de aquí en adelante.