Un museo mexicano expone por primera vez esta indumentaria regional y otras piezas artesanales de Asturias
05 may 2021 . Actualizado a las 16:14 h.Una vez más Asturias vuelve a traspasar las fronteras. En esta ocasión, ha atravesado el gran charco de la mano del traje llanisco y ha llegado a México. Allí un museo expone por primera vez la indumentaria regional asturiana junto con otras piezas artesanales del Principado. Todas ellas forman parte de ¿Quienes somos? Identidad y diversidad, una exposición sobre las diferentes comunidades culturales del estado mexicano de Nuevo León que explora el devenir histórico y aborda la diversidad cultural.
En esta exposición, que permanecerá hasta el 20 de junio, las piezas asturianas forman parte de la colección de Asturianos en el Noreste de México A.C. El traje femenino llanisco que está expuesto es de color negro con brocado de seda verde olivo. Por su parte, los elementos que lo componen están bordados con cristal de Swarowski negro con un peso total de alrededor de seis kilos.
De esta manera, es la primera vez que esta indumentaria se muestra en Latinoamérica como una pieza museística de representatividad, de identidad y valor cultural. Además, en la vitrina ubicada en el centro de la muestra también se pueden apreciar una montera, vasos escanciadores de sidra, un par de madreñas, piezas de loza de la extinta fábrica de San Claudio, un gaxapo o cachapa con piedra de afilar y una rueca tradicional.
La muestra se encuentra ubicada en el Museo Estatal de Culturas Populares, edificación que hace siglos fue la casa del gobernador. Una construcción civil, que es considerada como la más antigua de la ciudad de Monterrey y que fue propiedad de quien en dos ocasiones fue el de dirigente del Nuevo Reino de León (en 1741 y 1752), el asturiano Don Pedro Del Barrio Junco y Espriella, oriundo de Cardoso perteneciente al concejo de Llanes.
En este espléndido recinto está la exposición a cargo del Consejo para la Cultura y las Artes de Nuevo León CONARTE. Un producto que es el resultado del esfuerzo de cinco investigadores, Juan Dorcel, José Juan Olvera, Cristobal López, Alma Lara, así como de distintos fotógrafos y comunidades extranjeras.