El youtuber que se come tres kilos de fabada: «Qué os parece de raro. Yo lo veo un placer absoluto»

La gastronomía asturiana ha vuelto a ser protagonista de uno de los vídeos con más visualizaciones de Youtube. Esta vez ha sido la fabada quien ha acaparado la atención y lo ha hecho gracias Joe Burguerchallenge. Con un hambre insaciable, el creador de contenidos valenciano, quien arrasa en los concursos de comida, se ha a puesto a prueba con nada más y nada menos que tres kilos de este plato típico asturiano. «Qué os parece de raro. Yo lo veo un placer absoluto. Esto es todo verduritas, es una cosa sana», señalaba el youtuber al inicio del vídeo. Unas declaraciones que no tienen nada que ver con las vertidas al final del mismo.

Fue el restaurante K-Chopo, ubicado en el Prat de Llobregat y con tintes asturianos, el encargado de preparar este manjar. Servida en cazuelas de barro, la fabada como marca la tradición iba acompañada de su morcilla, chorizo y tocino, es decir, de su compango. No obstante, pese a que «lo típico es comérsela mientras se bebe sidra», como Joe Burguerchallenge es abstemio, este optó por ingerir agua -aunque no abrió la botella en todo el reto-. Tampoco el valenciano quiso acompañar la comida con pan, puesto que así «me entran más fabes».

Sin prisa, pero sin pausa, el youtuber fue completando poco a poco su reto. Entre cucharada y cucharada el valenciano apenas articulaba palabra, tan solo en determinadas ocasiones soltaba un «que buena está, está brutal», «espectacular» o «lo mejor que he comido en todo lo que llevo de canal».  Y así hasta bajarse las dos cazuelas. Además, por si fuera poco, solicitó un trozo de pan para mojar en el caldo y comérselo y aún así todavía le quedaba hueco para el postre: una tarta de queso de grandes dimensiones, haciendo caso omiso a su amigo que le sugería tomarse un almax.

Conclusiones

Para finalizar el vídeo, que aglutina ya más de 68.000 reproducciones, Joe Burguerchallenge ha contado cómo le ha sentado la ingesta de tres kilos de este plato típico asturiano. «Han pasado 12 horas desde que me comí la fabada. Ha sido una noche complicada. Me tuve que dormir sin poder moverme mucho porque estaba muy lleno, pero tampoco ha sido tan grave. He tenido que beber agua porque se me secaba la boca, como en cualquier reto», detalla antes de añadir que «ahora sí que noto un poco de flatulencias, pero no tan exagerado». «Se puede comer un reto de fabada así. Es duro, pero se puede», sentencia.

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