Los coches eléctricos son cada vez más reconocidos por sus beneficios medioambientales. La mayor eficiencia y la disminución de las emisiones que estos ofrecen los han hecho más atractivos que nunca. Son una alternativa óptima a los coches de combustión interna, ya que proporcionan un importante ahorro tanto de energía como de dinero.

Importancia del coche eléctrico como parte de la movilidad sostenible

El coche eléctrico se ha hecho cada vez más popular en los últimos años y ha dejado de ser el futuro de la movilidad para establecerse con fuerza en el presente para el bien de nuestro planeta.

La movilidad eléctrica es esencial para la creación de una sociedad conectada más limpia, segura e inclusiva en la que el ciudadano está en el centro de todos estos esfuerzos. Y es por ello que, en movimientos como los de la Global Mobility Call, un espacio global multisectorial, se impulsa el crecimiento de nuevos modelos de negocio para hacer frente a diversos problemas medioambientales que afectan a todos y que influirá notablemente en la disminución de la contaminación de la sociedad a nivel mundial.

La contaminación del aire, la congestión del tráfico y la devastación del medio ambiente son sólo algunos de los retos que los coches eléctricos pueden ayudar a paliar. Entre las ventajas de los coches eléctricos están:

Son amigables con el medio ambiente

Un coche eléctrico no produce emisiones mientras se utiliza, por lo que las ciudades y sus habitantes se benefician, ya que estarán libres de contaminantes y respirarán un aire más limpio.

Menor mantenimiento y número de averías

Otra ventaja de un coche eléctrico es que requiere menos mantenimiento. Mientras que un motor de combustión suele tener aproximadamente 30.000 piezas, un motor eléctrico posee un 60 % menos de estos componentes. Por lo que un coche eléctrico tiene muchas menos piezas móviles que deben ser mantenidas y sustituidas.

Esto también implica el uso de un menor número de líquidos contaminantes, como aceites o refrigerantes, imprescindibles para un motor a combustión y que un coche eléctrico no necesita.

Ahorro en el gasto del consumo eléctrico respecto al de la gasolina

Por supuesto, el combustible es un excelente ejemplo de ahorro de costes. Gracias a ellos, se pueden realizar viajes a precios más competitivos. En términos de cifras, esto implica que un vehículo eléctrico será hasta 10 veces más barato que los vehículos de gasolina o diésel.

La autonomía del coche eléctrico en la ciudad se multiplica

Esto se explica por el hecho de que en el tráfico de parada y arranque el coche no consume energía continuamente, como sí ocurre con un motor de gasolina o diésel.

Además, los coches eléctricos cuentan con sistemas de frenado regenerativo que capturan la energía de la desaceleración y la utilizan para recargar las baterías durante la conducción.

Silenciosos y confortables

El coche eléctrico también es más cómodo, ya que no produce el ruido de un motor de combustión, por lo que la experiencia de conducción es más tranquila. Además, sus sistemas de suspensión suelen ser mejores y proporcionan una conducción mucho más suave.

Sin restricciones en Zonas de Bajas Emisiones (ZBE)

Las zonas de bajas emisiones (ZBE) son áreas en las que se limita el tráfico en función de criterios medioambientales, normalmente restringiendo el uso de los vehículos más contaminantes.

Los coches eléctricos no tienen ninguna restricción en las Zonas de Bajas Emisiones, por lo que se puede entrar y circular sin problemas en este tipo de áreas.

Ventajas fiscales

Dependiendo del país, los coches eléctricos pueden tener ciertas ventajas fiscales. En algunos casos están exentos de pagar impuestos, mientras que en otros tienen un tipo reducido. Por otro lado, también suelen ser más baratos de asegurar que los coches de gasolina o diésel.

Como puedes observar, las ventajas de los coches eléctricos son muchas y variadas, y benefician tanto a los individuos como a la sociedad en su conjunto. Haz tu parte por el medio ambiente y haz el cambio hoy mismo.