El objetivo del alojamiento web o hosting es garantizar que tu sitio web funcione sin problemas y responda rápidamente, se puede decir que es un medio técnico para que tu web sea accesible para cualquier persona en internet. Como el alojamiento web es un elemento esencial para impulsar cualquier cosa en línea, hay muchas opciones y esto puede ser intimidante; aunque hay páginas como hostingtoplists.com que te ayudan a comparar infinidad de hostings y así puedas elegir el que más se adapte a tus necesidades.
Para que puedas identificar rápidamente cual tipo de hosting necesitas para tu web, te hicimos una breve guía que podrás revisar a continuación.
Alojamiento compartido
El alojamiento compartido es una de las opciones más populares y económicas para alojar un sitio web. Consiste en que varios sitios web compartan un único servidor. Con un plan de hosting compartido, todos los recursos del servidor, como la RAM y la CPU, son compartidos por los dominios. Dado que todos los recursos están distribuidos, los planes de alojamiento compartido son bastante económicos, lo que los convierte en una opción ideal para los que recién empiezan con su sitio web.
Muchas herramientas útiles, como los constructores de sitios web, el alojamiento de WordPress y poder enviar correos electrónicos a clientes, suelen estar incluidos en las cuentas de hosting compartido. Asimismo, la mayoría vienen con servicios adicionales, como:
- Nombre de dominio gratuito
- Certificado SSL gratuito
- Constructor de sitios web integrado
- Análisis de seguridad y antimalware
- Panel de control fácil de usar (cPanel)
- Copias de seguridad automáticas
La desventaja del hosting compartido es que lo utilizan varias personas, por lo que si tu "vecino" se vuelve viral, es posible que recibas menos recursos compartidos, lo que significa que la funcionalidad y la velocidad de tu sitio web se verán afectadas.
Dado que los proveedores de alojamiento web equilibran cuidadosamente sus recursos compartidos, en caso de que se produzcan aumentos repentinos de uso, esto es algo muy poco frecuente. No obstante, es algo a tener en cuenta.
Alojamiento de servidores privados virtuales (VPS)
Después de un plan de alojamiento compartido, el hosting privado virtual es una excelente "actualización". En este caso, sigues compartiendo el mismo espacio físico del servidor con otras páginas web. Tu sitio, por otro lado, está alojado en su propia pieza de "propiedad" virtual.
En este tipo de hosting, hay dos palabras clave:
- Privado: tienes acceso a recursos de alojamiento privados (como la RAM y la CPU) que no compartes con otros.
- Virtual: Tu servidor no es una máquina física, sino una pieza particionada (máquina virtual), que se ejecuta en un servidor "padre" que también aloja otras máquinas virtuales.
Considera que un servicio de alojamiento VPS es como el alquiler de un piso, en un edificio de varias plantas. Tienes total libertad dentro de tu alquiler, pero no puedes modificar la estructura del edificio en sí.
El alojamiento VPS es el más utilizado por las personas que no tienen los conocimientos técnicos necesarios para el hosting dedicado. Con el alojamiento VPS, se obtiene el ahorro de costes del alojamiento compartido con el control del hosting dedicado. Es una gran opción para los usuarios avanzados y los que quieren personalizar su sistema operativo.
Sin embargo, los servidores VPS siguen teniendo restricciones. Algunos servidores VPS te darán una capa extra de almacenamiento o ancho de banda durante un corto período de tiempo, para manejar un aumento en el tráfico. Sin embargo, la mayoría no lo hará de forma regular porque dicha redistribución también afectaría a otros sitios alojados en el mismo servidor.
Alojamiento de servidores dedicados
El alojamiento dedicado permite a los propietarios de sitios web tener el máximo control sobre su servidor, ya que el servidor es exclusivamente alquilado por ellos y su sitio es el único que se encuentra en él. Esto significa que tienes acceso total de root y de administrador, por lo que puedes controlar todo, desde el sistema operativo que ejecutas hasta la seguridad del sitio. Sin embargo, todo ese control tiene un precio.
Los servidores dedicados son uno de los tipos de alojamiento web más costosos. Suelen utilizarlos los sitios webs con mucho tráfico y los que requieren un control total del servidor. Además, el servidor requiere una cantidad importante de conocimientos técnicos para su instalación y mantenimiento.
Alojamiento en la nube
El hosting en la nube es la última moda del mundo tecnológico, se refiere a un sistema en el que muchos ordenadores trabajan juntos, utilizando los recursos informáticos combinados. Es un plan de alojamiento que funciona a través de una red y permite a los sitios web consumir el recurso informático como una utilidad.
Los usuarios pueden utilizar tantos recursos como necesiten, sin tener que crear y mantener su propia infraestructura informática gracias a esta característica. Como los recursos se reparten entre varios servidores, se reduce cualquier interrupción causada por un fallo del servidor.
El alojamiento basado en la nube es escalable, lo que significa que tu sitio puede ampliarse con el tiempo y utilizar tantos recursos como sea necesario sin incurrir en costes adicionales.