La tierna historia de dos compañeras de habitación en una residencia se hace viral

La Voz REDACCIÓN

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María Pedreda

Una sanitaria comparte en su cuenta de Twitter el aviso «más bonito del mundo» que ha tenido que atender

09 jul 2022 . Actualizado a las 20:46 h.

Las personas mayores siempre tienen sabiduría que enseñar y, en este caso, la sanitaria que lleva la cuenta de Twitter @RCPdesdemicole, ubicada en Asturias, quedó conmovida con lo que define como «el aviso más bonito del mundo». Una muestra de amistad verdadera de la que fue testigo en una residencia de ancianos. Carmen y Ana, nombres ficticios para proteger la intimidad de las mujeres, son dos amigas que comparten habitación en una residencia. «Una mujer en coma, con posible hipoglucemia severa» y una preocupación mutua. El hilo ha sumado más de 17 mil me gusta en menos de 24 horas.

La sanitaria explica que la paciente estaba echada en una de las camas, mientras que en la otra una mujer más mayor estaba sentada en el borde de la cama y no dejaba de mirar a su compañera, Carmen, que es diabética y se encontraba tendida sin reaccionar ante los estímulos. La sanitaria explica que comprobaron la glucemia y prepararon el material para coger una vía y administrar la glucosa intravenosa, de manera que aumentase el nivel de azúcar en sangre de Carmen.

Ana estaba muy preocupada por su compañera pues era la primera vez que le daba un bajón de azúcar por la noche. «Se pasó toda la noche moviéndose y hablando en sueños, a veces hasta gritando. La llamé un par de veces, pero seguía soñando. Y hace media hora dejó de moverse. Entonces ya me asusté mucho. La moví para que se destapase pero la vi así, pálida, sudando, con la mirada perdida, no me miraba, no me hablaba...Fui corriendo a buscar al personal de la residencia», explicó Ana a los equipos sanitarios sobre qué había sucedido a su compañera.

Cuando Carmen despertó, poco a poco, se puso a llorar, no por lo que le había sucedido, sino por el susto que le había dado a su amiga y compañera de habitación, Ana. «No sabéis lo que me quiere, lo atenta que es conmigo, lo que me cuida...¡Ay qué susto le habré dado! ¡Ay mi Anina, qué susto te habrás llevado!».

Antes de marcharse, las dos mujeres les dieron las gracias por haberlas ayudado. «Gracias, millones de gracias a vosotras. Yo de mayor quiero ser como vosotras. Quiero disfrutar de la vida como vosotras. Quiero tener una amiga como vosotras, y querer y que me quieran tanto como vosotras. Una maravilla haberos conocido», finaliza el hilo la usuaria de Twitter sobre la conmovedora amistad ante las adversidades.