El clarividente artículo de un periódico asturiano que se ha viralizado 100 años después de publicarse

La Voz REDACCION

VIRAL

F. Sotomonte

Entre los aciertos, «a los cines les va mal y la gente ve películas en casa» o «cualquiera puede crear contenidos»

09 sep 2024 . Actualizado a las 05:00 h.

«En 1924, el diario Región de Asturias publicó esta pieza de René Hervouin imaginando cómo sería el cine (y la sociedad) 100 años después, es decir, en 2024. ¿Echamos un vistazo para ver cómo imaginaban nuestra vida nuestros bisabuelos?», propone el tuitero y consultor Fernando de Córdoba en un reciente hilo en X con el que rescata de la hemeroteca del diario asturiano una pequeña joya escrita hace 100 años por el autor y cineasta René Hervouin (1895-1957) pergeñando el futuro.

«El gran literato frances René Hervouin, anticipándose al año 2024, ha escrito esta brillante fantasía que, como las de Julio Verne, quizá sean sobrepasadas por la realidad», introducen en el diario asturiano, que cerró en 1983 y justo había empezado a editarse en 1923, para presentar una fantasía que hoy efectivamente se queda corta. «Estamos en el año 2024. ¡Qué de cambios, de transformaciones y de hechos asombrosos!», escribe el articulista, que sobre todo se centra en la industria cinematográfica en una pieza titulada Lo que será el cinematógrafo dentro de 100 años.

De Córdoba, en un hilo que ha viralizado 100 años después el artículo del visionario Hervouin, destaca varios de los aciertos que predijo el literato cuando aún quedaban un par de años para que se estrenase la primera película sonora de la historia del cine. El más llamativo, sin duda, es el que augura, como resume el tuitero, que «a los cines les va mal y la gente ve películas en casa».

Así, Hervouin escribía en 1924 que, un siglo después, la industria del film cambiaría de aspecto: «Han desaparecido casi todos los locales dedicados a la proyección de películas y les ha sustituido el cinematógrafo del hogar. Los pisos se alquilan con teléfono y cinematógrafo». Otro acierto, la publicidad se ve en pantalla: «Todo ha sufrido una modificación profunda. El cine ha sustituido casi totalmente a la imprenta. también ha suplantado los carteles anunciadores, sustituyéndolos por carteles animados que instruyen e informan a la vez».

Con la prensa en papel acierta casi, casi de pleno: «Ha reducido su tiraje pero utiliza las películas de una manera tan interesante como inesperada», escribe Hervouin, que en vez de la irrupción de internet imaginaba que «en las fachadas de los grandes diarios, y en una pantalla gigantesca, se desarrollan los últimos acontecimientos del mundo entero» y «a las pocas horas» de ocurrir.

Otro acierto en el clarividente artículo, como dice De Córdoba, es que predice las tiendas online: «Las compañías de ferrocarriles y las grandes compañías transaéreas hacen una formidable publicidad por medio de las películas. La cinematografía en colores es cosa coriente, y los comerciantes suprimieron los viajantes y envían a sus clientes, en lugar de un muestrario, una película con su catálogo».

O que «cualquiera puede crear contenidos» en todos los sentidos: «En los estudios, que son millares, las compañías de artistas, que se cuentan por millares, trabajan sin cesar... La película no cuesta más que cinco céntimos el metro. El cine triunfa por todas partes y sus rayos luminosos disipan las últimas tinieblas de la ignorancia y hacen del año 2024 el del progreso, la ciencia y la luz». Bueno, aquí el tuitero que ha viralizado el artículo 100 años después de publicarse se ve obligado a matizar: «Viendo la cantidad de estos contenidos que hablan de que las vacunas tienen chips, de que la tierra es plana o de que hay razas inferiores... lo de que 2024 es el año del progreso, la ciencia y la luz no lo tengo claro».