Si en el 2000 la facturación del mercado discográfico superaba los 600 millones de euros, los españoles han gastado en el 2011 solo 148,6 millones en la compra de música.
La controvertida artista, que lanzará en mayo su nuevo trabajo, es la rival a batir en un año en el que U2, Coldplay y R.E.M. también serán protagonistas.