Un grupo de nómadas observó una bola de fuego en el cielo y siguió la pista, siete meses más tarde los científicos confirman que procede del planteta rojo.
La mayoría de estas «lluvias» provienen de los cometas, que dejan tras sí una abundante cantidad de meteoritos que luego se manifiestan en forma de «estrellas fugaces».
Las autoridades barajan como causas del suceso un escape de gas o un pico de tensión eléctrica. Y retienen al hombre que provocó las teorías sobre la caída de un satélite.
En la noche de ayer varios compostelanos afirman haber visto un meteorito. José Ángel Docobo, director del observatorio de la USC, explica el fenómeno.