Natural de Vilanova, enseña castellano en una de las universidades de Bisquek, la capital Se llama Ramón Martínez Paz, pero aquí en Kirzygstán, a miles de kilómetros y culturas de su Vilanova natal, todo el mundo le llama Moncho. Tiene 28 años y desde hace tres trabaja para la Agencia Española de Cooperación Internacional enseñando castellano en una de las universidades de Bisquek, la capital de esta ex república soviética de 4 millones y medio de habitantes encajonada entre Tayikistán, Kazajstán, Uzbekistán y China. Hasta que llegó el contingente que apoya el despliegue militar en Afganistán, Moncho era el único español en el país. «Me dieron a elegir entre Rusia, Kazajstán y Kirzygstán. Y aquí estoy. Ha sido toda una experiencia», dice mientras confiesa sus ganas de regresar a Galicia para ver a su familia y «no parar de comer».
D. BERIAIN
/
X. LOBATO Enviado especial