El astillero para el que trabajaban en exclusiva ofrece recolocar a la mitad de la plantilla pero sindicatos y trabajadores piden un nuevo puesto para todos los operarios.
Los populares critican que el alcalde no haya conseguido colocar en Zona Franca a una persona de su confianza y el BNG pide a la nueva delegada el mismo ritmo inversor en la ciudad.