Pichichi Sangalli

¿Quién marcará los goles? Esa era una de las grandes preguntas que se hacía el oviedismo cuando se cerró el mercado de fichajes. Blanco Leschuk, delantero que aporta muchísimo al juego de sus equipos, no es un goleador afianzado, Obeng y Mujica eran dos incógnitas y Rodri Ríos estaba lesionado. Tocaba mirar a la segunda línea.

En dicha parte del campo aparecían los nombres de Borja Sánchez, Nahuel Leiva y Marco Sangalli. Ninguno de ellos había superado la cifra de cinco goles en Segunda División, así que les tocaba dar un paso adelante. Borja ya lleva dos y Nahuel tres, pero Sangalli les lleva ventaja: el donostiarra, con el tanto de la victoria ante el Sabadell, suma cuatro dianas. 

En 17 jornadas, Marco Sangalli está a un solo gol de igualar su marca del curso pasado. Además, está a solo dos tantos de igualar su mejor marca de siempre en la categoría, los seis que sumó con el Mirandés en la 15/16. Acostumbrado a lograr tantos de bella factura, sus goles también son de los que dan puntos: tres de los cuatro tantos realizados han supuesto cuatro puntos al Real Oviedo. Mirandés, Alcorcón y Sabadell están de testigos.

Este era el registro que al jugador donostiarra le quedaba por pulir. El extremo, trabajador incansable, capaz de ser desequilibrante tanto por fuera como por dentro, dañando al rival por su costado natural o yéndose al centro y a la izquierda para crear superioridades, cada vez es un futbolista más completo.

Si a todo lo que ya tenía le añade agresividad en zona de remate (el tanto al Sabadell es el mejor ejemplo) y, sobre todo, el don del acierto, su techo se vuelve inimaginable. Por algo su renovación, ya cerrada, era vital para el Real Oviedo. El '8' ha encontado su lugar en el mundo del fútbol y, el oviedismo, a uno de los suyos.