Apoya estudiar todas las posibilidades de investidura «ante un frente anti que solo busca debilitar a España» y «acabar en una república federal laica». El líder del PP ve muy probable que no gobierne «por los pactos antiEstado de Sánchez» con una «amnistía inconcebible»
Génova pide «respeto», aunque asume que la investidura es «muy difícil». Urkullu, Aragonès y todos los presidentes socialistas salvo García-Page, que guarda silencio, rechazan reunirse con el líder popular