Controles militares en Caracas para sofocar las protestas de la oposición

PEDRO GARCÍA OTERO CARACAS / CORRESPONSAL

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Cristian Hernandez | EFE

La capital venezolana, paralizada por la presencia de tanquetas y antidisturbios

26 may 2016 . Actualizado a las 07:39 h.

Caracas fue ayer una ciudad paralizada por los cortes de calles, asediada por tanquetas policiales y cuerpos antidisturbios y colapsada por decenas de controles militares, para impedir que la oposición se manifestase ante la sede del Tribunal Supremo. Finalmente, ante unos pocos centenares de detractores de Nicolás Maduro que lograron burlar los cercos militares y policiales, el líder opositor Henrique Capriles advirtió a los militares que la oposición «no quiere un golpe de Estado en Venezuela», e instó al estamento castrense «a respetar la Constitución».

Era la segunda vez en una semana que Capriles hablaba de «golpe» y mencionaba a los «militares». «A la oposición solo le interesa sacar a Maduro del poder por la vía institucional», insistió. «Está llegando para ustedes el momento de decidir si están con la Constitución o están con Maduro», concluyó el líder de Primero Justicia.

Desde la semana pasada, una sentencia de la Corte de lo Contencioso-Administrativo del Supremo prohíbe protestar frente a las sedes del Consejo Nacional Electoral, ante las que la oposición había intentado manifestarse, sin conseguirlo, en semanas anteriores para exigir al organismo que no retrase los trámites para convocar el referendo revocatorio. Las declaraciones de Capriles se produjeron frente a esta sede judicial, haciendo inútil el enorme esfuerzo del Gobierno -según cálculos extraoficiales, desplegó más de 1.500 militares y policías- para desanimar a los opositores. 

Continúan los saqueos

Capriles entregó un documento exigiendo que se elimine la prohibición de protestar ante las sedes del órgano electoral, pues entiende que restringe el derecho de manifestación y afirmó que «los jueces [del Supremo] solo toman decisiones que están contra el pueblo». Insistió además en que la oposición «seguirá manifestándose pacíficamente» hasta lograr la convocatoria del referendo revocatorio. «Mostrarle la Constitución al Gobierno es como mostrarle una cruz a Satanás», añadió.

Mientras policías y militares cercaban las marchas de la oposición, la violencia contra establecimientos y camiones se adueña Venezuela. Ayer se registraban nuevos intentos de saqueos y robos en todo el país, acuciado por la crisis alimentaria. Las multitudes destrozan los comercios y cada día las redes sociales dan cuenta de nuevos incidentes. En el oeste de Caracas, los comercios cerraron ante los rumores de que intentarían vaciarlos.

El secretario general de la OEA, Luis Almagro, presentará su informe sobre la situación política y social de Venezuela la próxima semana «a más tardar». En él prevé anunciar si aplica la Carta Democrática, lo que podría llevar a su suspensión en el organismo panamericano.

Un juez impide la liberación del jefe de Seguridad del Parlamento pese a no tener cargos

El jefe de seguridad de la Asamblea Nacional, Ángel Coromoto Rodríguez, quedó detenido en la sede de la policía política (Sebin) venezolana, después de que «una nueva orden de captura» anulara la autorización de excarcelación que había firmado un tribunal de Caracas e incluso cuando la Fiscalía no había presentado cargos contra él.

Rodríguez había sido detenido a raíz de las acusaciones del ministro del Interior, Gustavo González López, de que había entregado dinero a los manifestantes que golpearon a policías en las protestas del miércoles 18 de mayo. Cuando iba a ser liberado, lo hicieron esperar hasta que, a las 2 de la madrugada, el Tribunal 4 de Control de Caracas lo acusó de homicidio frustrado, según informó Alfredo Romero, director del Foro Penal Venezolano. Los mismos cargos les fueron imputados a cinco de los siete jóvenes detenidos en los días siguientes a las protestas, mientras que los otros dos quedaron en libertad con orden de presentarse en el juzgado periódicamente. «Sube a 93 el número de personas encarceladas por motivos políticos en Venezuela», indicó Romero.

Rodríguez nunca fue liberado por el Sebin, por lo que sus abogados consideraron que «fue secuestrado». El Tribunal 4 de Control, que fue el que ordenó la detención de Leopoldo López, está considerado, según portavoces de la oposición, el tribunal del Gobierno. 

Otro joven liberado

Un octavo joven, Christian Manrique, estuvo más de cien horas desaparecido tras ser arrestado el viernes, en un procedimiento que anunció el ministro de Interior en Twitter. Horas después de denunciar el abogado José Vicente Haro que el caso de Manrique parecía una desaparición forzosa, fue misteriosamente «liberado» en una zona del oeste de la capital por funcionarios que, aparentemente, lo tenían secuestrado, según señaló Haro en las redes sociales.

El estado de salud del joven no fue divulgado, pero fuentes extraoficiales señalaron que se encontraba tan gravemente golpeado que esta fue la razón por la cual no fue presentado ante tribunales. Los otros detenidos también denunciaron maltratos para que inculparan a Rodríguez.

MIGUEL GUTIÉRREZ | EFE

Albert Rivera: «Podemos vino a buscar el dinero y apoya lo que está pasando aquí»

Albert Rivera declaró en Caracas que «Podemos vino aquí a buscar dinero y apoya lo que está pasando aquí». «Cuando él venía a formar aquí a los chavistas, cuando él colaboraba junto a [Juan Carlos] Monedero aquí, venían a buscar dinero para sus fundaciones», añadió. «Si alguien me quiere convencer de que este modelo económico y político que aplaude Pablo Iglesias es el futuro de España, me va a tener enfrente», agregó.

Tras intentar, sin conseguirlo, entrevistarse con Leopoldo López en la cárcel militar de Ramo Verde, el líder de Ciudadanos lo intentó, más tarde, con Antonio Ledezma y Daniel Ceballos, alcaldes de Caracas y San Cristóbal en arresto domiciliario desde hace más de un año. Con López sí pudo conversar por teléfono. «Ha sido un orgullo poder hablar con él», dijo más tarde durante una reunión con familiares de presos políticos. «Pude hablar dos minutos y ha sido emocionante. Le he deseado mucha fe, mucha fuerza, mucho ánimo, pero no le hace falta [?], Leopoldo está más fuerte que nunca, está fuerte mentalmente», les dijo. «Es una persona valiente, que está aguantando en la cárcel la represión de un Gobierno que por un lado dice que quiere dialogar, y por otro, a los que queremos dialogar y exigir libertad no nos deja ver a los presos políticos», añadió.

Tras reunirse con Henrique Capriles, Rivera afirmo su convencimiento de que «el revocatorio es el camino para Venezuela».

Nicolás Maduro se refirió a Rivera sin nombrarlo durante una concentración chavista. La oposición «se la pasa trayendo oligarcas», dijo, y añadió que la visita de Rivera muestra que la oposición venezolana «quiere entregarle el país al Imperio español».