Francisco Blanco asegura que el ministerio comparte la idea de que «sería absurdo» acabar demoliendo una instalación que en estos momentos cumple «con toda la legislación vigente»
01 feb 2017 . Actualizado a las 17:48 h.El ministro de Energía, Álvaro Nadal, se ha comprometido con el Gobierno del Principado a buscar vías para regularizar la situación de la regasificadora de Gijón, paralizada por orden judicial tras una inversión de unos 360 millones de euros, por vulnerar su construcción la normativa vigente entonces.
El consejero de Empleo, Industria y Turismo, Francisco Blanco, ha mantenido hoy una reunión con Nadal para abordar diferentes asuntos de interés para la región, como la situación de la minería del carbón, el sistema de subasta de interrumpibilidad eléctrica del que dependen grandes industrias y la regasificadora de Gijón.
Según ha explicado Blanco al término del encuentro, Nadal se ha comprometido con el Gobierno del Principado «a buscar vías para la regularización administrativa» de la regasificadora ya sea a través de un acuerdo del Consejo de Ministros, como ya se hizo con la instalación de A Coruña, o con «alguna otra fórmula».
El Tribunal Supremo ratificó la ilegalidad de la regasificadora ya que en el momento del inicio del procedimiento administrativo para su construcción incumplía una norma entonces vigente que prohibía este tipo de instalaciones a menos de 2.000 metros de zonas habitadas, una exigencia que más tarde se suprimió.
El consejero ha asegurado que Nadal comparte la idea de que «sería absurdo» acabar demoliendo una instalación que en estos momentos cumple «con toda la legislación vigente».
Blanco ha valorado la «buena sintonía» generada en una reunión en la que, según ha explicado, el ministro también ha reconocido la «importancia» del carbón y de las centrales térmicas que lo utilizan para producir electricidad dentro del sistema de generación con que cuenta España por la flexibilidad que ofrecen.
A este respecto, ha añadido el consejero, Nadal también se ha comprometido «a buscar una solución más allá de 2018», fecha prevista para el cierre de las explotaciones deficitarias, para las minas que puedan ser rentables así como a incentivar la desnitrificación -reducción de la emisión de los óxidos de nitrógeno (NOx)- en las centrales para que puedan seguir quemando mineral.
El Principado y Energía también han acordado la firma del convenio marco para que Asturias pueda acogerse a los nuevos fondos mineros pese a que aún carecen de partida por la prórroga presupuestaria del Estado y avanzar en la fijación de los criterios para los proyectos que puedan acogerse a estas inversiones.
El consejero también ha dicho que Nadal es «consciente» de que la actual subasta anual del servicio de interrumpibilidad eléctrica, que otorga compensaciones a las empresas por estar dispuestas a desconectarse del sistema en caso de necesidad, tiene «carencias por las dificultades que genera a la hora de hacer previsiones del coste de la energía a medio y largo plazo, y por tanto a la hora de decidir sus inversiones y proyectos de desarrollo».
A esta subasta acuden grandes industrias radicadas en Asturias como la siderúrgica ArcelorMittal, Asturiana de Zinc y la aluminera Alcoa, que en los últimos años amenazó con cerrar sus plantas de Avilés y Coruña si no obtenía las contraprestaciones necesarias para garantizar la competitividad de ambas instalaciones.
Blanco ha avanzado que el Ministerio analizará vías que aligeren los costes energéticos de la industria electrointensiva, sin cargar esta rebaja a otros clientes del sistema eléctrico.
El consejero ha propuesto que el sistema de subasta de interrumpibilidad se complemente con otras medidas que aseguren a la gran industria un suministro con costes competitivos, estable y predecible para que las empresas puedan programar inversiones y estrategias a largo plazo.