Irán elige entre el aperturismo o el regreso al aislamiento

Rosa Paíno
rOSA pAÍNO REDACCIÓN / LA VOZ

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ATTA KENARE | AFP

Rohaní parte como favorito frente al ultraconservador Raisí

19 may 2017 . Actualizado a las 07:37 h.

La cauta apertura al mundo o el regreso al aislamiento. Es lo que se juega hoy Irán en las urnas. Los 56 millones de electores con derecho a voto deben decidir si el presidente reformista Hasán Rohaní repite mandato o lo sustituye el ultraconservador Ebrahim Raisí, el candidato del establishment y del ayatolá Alí Jamenéi. 

La elección es una suerte de referendo a favor o en contra de la apertura. Después de cuatro años en el poder, a Rohaní le han quedado muchas de sus promesas por cumplir. Su apuesta por mayores libertades ha topado siempre con el freno que le imponen los órganos guardianes de la revolución islámica.

Aunque logró sacar al país del aislamiento con la firma del histórico acuerdo nuclear del 2015, el iraní de a pie no ha visto el gran cambio prometido con el fin de diez años de sanciones económicas. Los jóvenes, la principal cantera de votos de los reformistas, siguen sin ver claro su futuro, con un paro estimado en el 27 %. 

ABEDIN TAHERKENAREH | EFE

El petróleo corre de nuevo y políticos y empresarios occidentales han viajado a Teherán en busca de negocio, pero las inversiones extranjeras y con ellas los nuevos puestos de trabajo siguen sin llegar. Principalmente, porque los grandes bancos se resisten a financiar los proyectos comerciales, debido a las sanciones que aún mantiene Estados Unidos, y porque los dirigentes occidentales siguen sin ver en Irán un socio fiable, sobre todo por su apoyo a Bachar al Asad.

La economía ha centrado la campaña electoral. Raisí acusa a su rival de no haber sabido gestionar el levantamiento de las sanciones y no ha dejado de repetir en sus mítines que creará «un millón de empleos al año». Su alternativa es apostar por una «economía de resistencia», independiente de Occidente. Algo que ningún economista considera posible dada la obsoleta infraestructura e industria iraní. «Los clérigos no pueden fabricar aviones o barcos», afirman.

En la jornada de reflexión, Rohaní recibió una buena noticia. A pesar de la retórica hostil de Donald Trump, Washington ha decidido mantener la suspensión de las sanciones a Irán. No obstante, en un intento de mantener su firmeza, el Departamento del Tesoro de EE.UU. anunció nuevas sanciones por el programa de misiles de Teherán. Desde la llegada de Trump a la Casa Blanca, las relaciones entre Teherán y Washington no han dejado de empeorar.

Rohaní parte como favorito, pero el índice de participación será decisivo. En Teherán corre el fantasma de un deja vú de las elecciones del 2009, cuando Mahmud Ahmadineyad ganó al reformista Mir Husein Musavi y miles de jóvenes denunciaron en las calles el fraude electoral. 

Un clérigo con altas aspiraciones

El clérigo y jurista Ebrahim Raisí (1960, Mashad) es uno de los favoritos a suceder al líder supremo, el ayatolá Alí Jameneí. Como político novato es una gran incógnita, pero ha logrado consensuar el apoyo de los clérigos ultraconservadores más influyentes y también d Jamenéi.

En sus cargos de fiscal general y vicejefe de Justicia ha supervisado el cumplimiento de las rigoristas normas del régimen islámico. El año pasado fue nombrado director del mausoleo del imán Reza (el único imán del chiísmo enterrando en Irán), uno de los puestos más prestigiosos del país persa.

El reformista pragmático

Hasán Rohaní (1948, Sorje) sabe que aún le debe mucho a los que confiaron en él hace cuatro años. Sobre todo a los jóvenes (la edad media de la población iraní no supera los 30 años) que «han elegido el camino de la libertad», como recuerda siempre. Este político pragmático cree que la mejor apuesta para mejorar la economía y las libertades es abrirse al mundo. Su trayectoria política se alarga desde los años del triunfo de la revolución de 1979. Tiene el respaldo del expresidente Mohamed Jatamí, y de los excandidatos Mehdi Karubi y Mir Hosein Musavi, ambos bajo arresto domiciliario desde el 2011.