El Gobierno invita a Puigdemont al Congreso para participar en el proyecto que abordará la reforma de la Constitución

Francisco Balado Fontenla
Fran Balado MADRID | LA VOZ

ACTUALIDAD

Se le ha planteado «una pregunta sencilla para acabar con un problema complejo», apunta Soraya Sáenz de Santamaría. «Todavía está a tiempo»

13 oct 2017 . Actualizado a las 17:13 h.

«Todavía está a tiempo». La vicepresidenta del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría, volvió a insistir este viernes en la rueda de prensa tras el Consejo de Ministros de que el presidente catalán, Carles Puigdemont, está dentro de plazo para responder al requerimiento y reconducir así la situación en Cataluña, evitando la aplicación del artículo 155 de la Constitución. Tan solo debe responder a «una pregunta sencilla para acabar con un problema complejo», dijo la vicepresidenta.

Sáenz de Santamaría, en la misma línea que ayer abrió Pedro Sánchez, considera que el mejor marco para recuperar el diálogo es el Congreso de los Diputados, «en donde está representado todo el pueblo español». En concreto, en la comisión abanderada por el PSOE para la revisión de la Carta Magna y que forma parte del pacto entre Ferraz y Moncloa. «Esta oferta no es solo del Gobierno, sino de una amplísima mayoría del Congreso. Es sensata, moderada y entendible. Y demuestra que el diálogo no hay que exigirlo, sino practicarlo» aseveró. 

Dentro de esta llamada para el regreso a la ley, Sáenz de Santamaría apuntó varias razones económicas. En el sanedrín del Gobierno de esta mañana el ministro de Hacienda ha presentado un plan presupuestario para el 2018. «Debía ser un buen año, pero los acontecimientos en Cataluña nos hacen ser más prudentes, sin llegar a descartar un descenso de las previsiones económicas», razonó. «Los acontecimientos están poniendo en riesgo la recuperación económica de Cataluña». Mencionó dos indicadores: el parón de la inversión económica, con una caída en territorio catalán del 10%, que contrasta con un alza del 13 % en el resto de España, y el bajón en las reservas turísticas, con anulaciones que cifró entre un 20 y 30 %.

En el turno de preguntas, la vicepresidenta se mostró especialmente preocupada por la carta que envió la CUP al Govern, de la que tradujo el último párrafo, que dice: «Seguiremos sin el apoyo de los mercados y de los estados». Tras apuntar que de esta manera el progreso económico y el bienestar es imposible, insistió a Puigdemont en que aceptara la oferta del Gobierno. 

«¿Es la última?», se le planteó en la rueda de prensa. La vicepresidenta optó por esquivar la rotundidad: «Es la más importante». En ningún caso se aventuró a avanzar cómo sería la aplicación del 155, ya que permite un amplio abanico, y prefirió no hablar del futuro para insistir en la oferta al presidente catalán. 

Al inicio de su intervención, la número dos del Ejecutivo trasladó el pésame a la familia del capitán Borja Aybar, fallecido ayer en un accidente de avión tras haber participado en el desfile del Día de la Fiesta Nacional.