Samsung avanza en el Galaxy A8 las tendencias que dominarán en el próximo Mobile World Congress

Javier Armesto Andrés
Javier Armesto MADRID / E. ESPECIAL

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Es el primer smartphone de la compañía con doble cámara frontal

19 ene 2018 . Actualizado a las 19:22 h.

En el negocio de los smartphones, la gama media es el escenario de la batalla más cruenta. El segmento premium tiene tres claros ganadores (Apple, Samsung y Huawei) y en el de los terminales low cost los fabricantes chinos han acabado imponiendo su ley, con marcas como ZTE, Lenovo (propietaria de Motorola), Oppo y, sobre todo, Xiaomi. La compañía de Pekín arrasó las pasadas Navidades en España con su A1, un móvil de 229 euros y prestaciones avanzadas. 

Cada vez es más difícil conseguir atraer al usuario hacia precios por encima de los 300 euros, porque hay móviles low cost por la mitad de esa cifra capaces de cumplir sobradamente las expectativas de la mayoría del público. La pantalla, la cámara y el diseño son los tres aspectos que más influyen en la decisión de compra y Samsung lo ha tenido en cuenta a la hora de diseñar su nuevo Galaxy A8.

El móvil, presentado ayer en Madrid, anticipa las tendencias que dominarán en el próximo Mobile World Congress de Barcelona, a finales de febrero. La pantalla -de 5,6 pulgadas SuperAMOLED- tiene formato 18,5:9, convertido ya en estándar, permite visualizar más contenido en vertical sin necesidad de hacer scroll (deslizar con el dedo hacia abajo) y facilita la utilización de dos aplicaciones al mismo tiempo. Está embutida en un cuerpo que fusiona aluminio y cristal, casi sin marcos y con una suave curvatura en el borde trasero.

El A8 tiene certificado IP68, lo que significa que está protegido contra la entrada de polvo y es resistente al agua. Esto último conviene matizarlo: las pruebas consisten en la inmersión en agua dulce hasta 1,5 metros de profundidad durante un máximo de 30 minutos. Pero Samsung aclara que «no protege frente a fuertes lluvias o salpicaduras significativas». Tampoco se garantiza la integridad en agua salada.

La gran novedad de este terminal es la inclusión por primera vez en el catálogo de Samsung de una doble cámara frontal. Cuenta con dos objetivos de 16 y 8 megapíxeles que permiten hacer retratos con bokeh (desenfoque artístico del fondo) y captar más escena gracias a su gran angular. No se puede decir que la cámara trasera sea peor, ya que con una apertura de f/1.7 es algo más luminosa, pero sin duda es una apuesta del fabricante asiático por los selfis y aplicaciones sociales como Instagram. El software incluye filtros, stickers, modo belleza y toda la parafernalia que ha hecho que los móviles hayan jubilado a las cámaras compactas.

Otras características del A8 son el reconocimiento facial y de huella dactilar (el sensor se ha colocado centrado en la parte trasera, corrigiendo así un defecto de los Galaxy S8 y Note 8), USB tipo C (reversible), jack de auriculares y la posibilidad de añadir dos cuentas distintas de las aplicaciones de mensajería como WhatsApp (por ejemplo, la personal y la del trabajo). El chipset del teléfono es Octa Core, es decir, tiene ocho núcleos, repartidos entre dos procesadores: uno a 2.2GHz y otro a 1.6GHz, que se van alternando a la hora de ejecutar las diferentes tareas. La batería tiene 3.000 mAh (desde el batterygate Samsung prefiere no forzar en este apartado) y el terminal mide 8,4 milímetros de grosor y pesa 169 gramos.

Con 4 GB de RAM y 32 GB de almacenamiento, el A8 es compatible con pagos móviles gracias a su chip NFC incorporado y existe la opción de adquirir la versión con doble SIM -que tiene la ventaja de que la segunda tarjeta no ocupa el mismo lugar que la microSD como en otros smartphones-. Estará disponible en tres colores, gris orquídea, dorado y negro (la cubierta trasera de este último es un imán para las huellas de los dedos).

La compañía coreana, primer fabricante del mundo de smartphones, confía en que este móvil sirva para mantener su serie A como una referencia en la gama media. En España ha vendido 1,6 millones de sus hermanos menores, el A3 y el A5, lanzados el año pasado. No lo tendrá fácil, porque el precio de 499 euros lo sitúa peligrosamente más cerca de la gama alta. A diferencia de Apple, los teléfonos de Samsung y el resto de terminales Android tienden a depreciarse con el paso de los meses y actualmente se pueden encontrar los buques insignia del fabricante coreano (Galaxy S8, S8+ y Note 8) por debajo de los 700 euros.

Celestino García, vicepresidente corporativo de Samsung España, declaró que el A8 es «un smartphone diseñado para aquellos usuarios que quieren una experiencia móvil completa y sencilla y, al mismo tiempo, sacar el máximo provecho de su smartphone compartiendo en redes sociales sus últimos selfis o disfrutando de contenido multimedia en alta calidad como películas o videojuegos». García explicó que su compañía quiere mantenerse «fiel a tres aspectos: tecnología para todos, tecnología sencilla y tecnología inteligente. Estamos expuestos a que la tecnología se pierde dentro de la tecnología», y desde ese punto de vista el Galaxy A8 «es un ejemplo de la apuesta de Samsung para ofrecer productos innovadores y conseguir un mundo conectado que simplifique la vida cotidiana de los usuarios».

Un último detalle: el A8 viene con sistema operativo Android 7.1 Nougat. Los responsables de Samsung explicaron que han decidido no incorporar la última versión del software de Google (8.1 Oreo) hasta que esté lo suficientemente pulido y pueda ser implementado en el teléfono con todas las garantías. Esto podría dejarlo en inferioridad de condiciones respecto a otras marcas como Huawei, que ya incluye Android Oreo en sus Mate 10 y Mate 10 Pro, o los Pixel y Nexus de Google. Honor (segunda marca de Huawei), Lenovo, HTC, BQ y Nokia también han anunciado que pasarán sus smartphones más avanzados a la última versión. Entre otras ventajas, Oreo limita los procesos en segundo plano, ahorrando por consiguiente mucha batería; permite ordenar las notificaciones por categorías; añade un número junto a los iconos de las aplicaciones para saber cuántas tareas tenemos pendientes o mensajes sin leer; incorpora nuevos emojis, y agrega soporte para redes inalámbricas (NAN) para Wi-Fi basadas en Wi-Fi Aware.