Primer ataque terrorista a la Brilat en Mali con dos yihadistas muertos

Desde finales de noviembre, los 2.800 kilómetros que separan Pontevedra de Mali parecen muchos menos. No en vano, desde ese mes, en el país africano está desplegado un contingente con 292 militares españoles que, en su mayoría, pertenecen a la Brilat, con base en la ciudad pontevedresa. Por eso, ayer, cuando en centro de adiestramiento de Kuolikuoro, en Mali, se registró un doble atentado terrorista, la noticia estremeció Pontevedra. Afortunadamente, y según confirmó el Estado Mayor de la Defensa, no hay heridos ni fallecidos españoles, como tampoco hubo muertos entre las fuerzas militares malienses. Eso sí, desde el Gobierno del país africano precisaron que, como consecuencia del atentado, «son dos los asaltantes muertos y tres bajas militares». Estos últimos fueron asistidos en el hospital de campaña Role 2, de tal modo que, a las pocas horas, dos de los militares malienses ya habían abandonado el centro de salud.

La Brilat está en Mali por mandato de la Unión Europa, para apoyar al Ejército local en su intento de frenar el yihadismo. Así, lo que hacen los militares españoles es adiestrar a sus homólogos del país africano y darles asesoramiento estratégico. La misión comenzó a finales de noviembre del 2018 y la vuelta a casa está prevista en mayo. Operan desde varias bases y una de ellas es la de Koulikuoro, atacada la pasada madrugada.

Primero, un coche bomba

Según los datos del Ministerio de Defensa, todo ocurrió de madrugada. Se produjeron dos ataques consecutivos con un coche bomba y con armas de asalto contra el centro de adiestramiento. La primera acción terrorista, que tuvo lugar pasadas las 3.00 horas, se produjo al explotar un coche bomba con un terrorista suicida a bordo en el principal acceso a las instalaciones. Instantes después, explotaba un segundo vehículo, situación a la que siguió un continuó fuego de fusilería dirigido a otro de los accesos del citado centro de entrenamiento.

Tras insistir en que no se registraron heridos ni fallecidos españoles, el Ministerio de Defensa indicaba que sí resultaron heridos dos militares de Mali. En la acción terrorista, que algunas fuentes atribuyen a Al Qaeda, murieron dos de los terroristas, mientras que «el número de atacantes está bajo investigación», destacaron desde EUTM-Mali.

Conscientes de que pronto llegaría a España la noticia, los militares de la Brilat trataron de comunicar personalmente a sus familias que estaban bien. La mujer de uno de los militares desplazados en Mali señalaba que no había podido hablar con su marido, pero que sí le había indicado que estaba sano y salvo y que, si veía las noticias, no se preocupase. Aún así, esta persona señalaba que sigue presa del nerviosismo: «Pues sinceramente este susto lo llevamos peor que mal, es un sufrimiento desde que te despides, pero lo tienes que sobrellevar. Pero si encima le añades esto que ha ocurrido, viviré con el miedo a que no llegue hasta que lo abrace y esté con su familia», indicaba. Su sentir, en realidad, resume el de muchas otras familias, tal y como podía verse a través de distintos comentarios en las redes sociales.

El doble atentado terrorista fue perpetrado justo en el ecuador de la misión en Mali. Hasta ahora, el despliegue del ejército en el país africano había transcurrido sin incidentes relevantes, al menos que trascendiesen. Es más, es probable que se trate de uno de los primeros o quizás el único ataque sufrido en esta base en los despliegues de la EUTM-MALÍ.

Cuatro años sin misiones

La Brilat llevaba, hasta el 2018, cuatro años sin llevar a cabo ningún despliegue internacional -en el 2016 y el 2017 se realizaron únicamente operaciones de apoyo en Senegal y Mauritania-. En cambio, ahora mismo tiene desplegados soldados tanto en Mali como en Líbano. En este último país la Brilat tienen desplazados a 600 militares que, al igual que los de Mali, pasaron la Navidad alejados de sus familias y que no se prevé que regresen a la base militar pontevedresa hasta el mes de mayo. En este caso, la operación se realiza bajo el paraguas de la ONU y, por ahora, sin incidentes importantes.

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