Una prueba de ADN confirma que una profesora italiana tuvo un hijo con un alumno menor

efe ROMA

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La docente, de 35 años, daba clases particulares de inglés al niño, de 13

13 mar 2019 . Actualizado a las 19:47 h.

La Fiscalía de la ciudad italiana de Prato (centro) ha abierto una investigación contra una profesora de 35 años después de que unas pruebas de ADN demostraran que el hijo que tuvo hace unos meses es de un alumno adolescente. La profesora daba clases particulares de inglés al joven a finales de 2017 y un año después tuvo un hijo que ahora las pruebas genéticas han atribuido al menor, que entonces tenía 13 años, según indicó la Fiscalía.

La mujer, que dio a luz en el otoño de 2018, fue interrogada el lunes durante tres horas para dar su versión de los hechos, aunque nada ha trascendido de su declaración. La familia se dio cuenta de que el adolescente vivía momentos de inquietud y nerviosismo y este acabó reconociendo que había mantenido relaciones sexuales con la profesora y que ella le había informado de que el hijo que acababa de tener era suyo.

Fue entonces cuando la familia del menor decidió denunciar a la docente, con la que mantenía una relación de amistad.La Fiscalía de esa ciudad toscana ha abierto una investigación por el posible delito de «actos sexuales con menores», que puede acarrear penas de entre tres y seis años de prisión. La mujer pidió hablar con los fiscales y el pasado fin de semana aceptó someter a su hijo a un examen genético que ha certificado la paternidad del adolescente, de acuerdo a las mismas fuentes.

Ahora las autoridades tratan de reconstruir todos los hechos, entre otras cosas, con el material que recuperen de sus respectivos teléfonos móviles. La profesora acudió a testificar acompañada por su actual pareja, que ha reconocido al bebé como su hijo

Otro caso, en España

En España, el colegio San Miguel de Gijón apartó en el 2018 provisionalmente de sus funciones docentes a una de sus profesoras por su presunta relación sentimental con uno de los alumnos. El centro, una escuela católica vinculada a la parroquia de San Miguel en el barrio gijonés de Pumarín, investiga el posible vínculo entre un alumno de 4º de Educación Secundaria Obligatoria y una profesora de Primaria, por lo que ha decidido abrir una investigación y suspender, entretanto, a la docente de sus funciones. El director del centro, Miguel Campos, confirmó que el alumno sigue yendo al centro educativo y que no se ha tomado ninguna medida contra él, al considerar que «en absoluto ha cometido ninguna irregularidad». Del mismo modo, ha puntualizado que «lo de la profesora está por ver». La docente lleva algún tiempo trabajando en el centro, pero no es profesora del alumno en cuestión.

El centro difundió en su día un comunicado en su página web en el que manifestaba hallarse «seriamente preocupado por la situación producida por la presunta relación de un alumno y una profesora del Centro». La dirección del centro tuvo la primera información el jueves, 17 de mayo e «inmediatamente» activó «todos los protocolos previstos para situaciones de emergencias», incluyendo el aviso a «los organismos de inspección» y el AMPA del centro que «apoyan la posición del colegio».

Asimismo, anuncia que «tomará las medidas oportunas que requiere la situación, asumiendo su responsabilidad» y que «debidamente asesorado, tratará el asunto con la debida cautela y discreción, pensando siempre en el bien del alumnado». El colegio reitera la fidelidad a una «trayectoria, estilo y valores, son de sobra conocidos» y afirma seguir «en la misma línea y ningún acontecimiento puede apartarle de ella».