Compañeros del repartidor fallecido de Glovo culpan a la empresa de su muerte: «Somos los nuevos esclavos del siglo XXI»

Redacción LA VOZ / EFE

ACTUALIDAD

Fue atropellado por un camión de limpieza anoche. Hoy sus compañeros han mostrado su indignación por las condiciones de trabajo

27 may 2019 . Actualizado a las 16:13 h.

Un conductor de una bicicleta que se dedicaba al reparto de comida a domicilio (Glovo) ha fallecido esta noche en el centro de Barcelona al ser atropellado por un camión del servicio de limpieza, según han informado a Efe fuentes de la Guardia Urbana de la capital catalana. El siniestro se ha producido sobre las 23:15 horas en el cruce entre la calle Balmes y la Gran Vía de las Corts Catalanes, han indicado las fuentes.

Hasta el lugar se ha desplazado un equipo de emergencia que no ha podido hacer nada por salvar la vida del ciclista, así como varias patrullas de la Guardia Urbana, que han creado un cordón de seguridad para desviar el tráfico en la zona. La Guardia Urbana de la capital catalana se ha hecho cargo de la investigación y la consiguiente tramitación del atestado del suceso.

Toni Albir | EFE

Protesta ante la sede la empresa

Unos 80 compañeros del repartidor de Glovo fallecido anoche se han concentrado este domingo frente al centro de operaciones de la empresa y han cortado la calle con sus bicicletas y una hoguera hecha con sus bolsas de trabajo.

Los concentrados han mostrado su indignación por las condiciones de trabajo de Glovo, empresa a la que culpan de la muerte del joven de 22 años, informa Efe.

«Sabíamos que esto pasaría antes o después porque este modelo de negocio te obliga a trabajar muchas horas», ha dicho a Efe Javier Morata, extrabajador de esta empresa de reparto a domicilio en bicicleta.

«Somos los nuevos esclavos del siglo XXI. Trabajamos en condiciones indignas y el cansancio provoca accidentes», ha señalado un trabajador nepalí que no ha querido dar su nombre pero ha asegurado que conocía al fallecido y que era compatriota suyo.

«Los inmigrantes todavía cobran menos que los nacionales -ha aclarado Morata-, porque como no tienen papeles no facturan directamente a la empresa sino que lo hacen a través de intermediarios que se llevan una comisión», informa Efe.

Algunos de los trabajadores han colocado flores y velas en la puerta de la empresa y han intentado hacer un acto de recuerdo pacífico, pero otros se han mostrado muy indignados y han tirado las bicicletas en medio de la calzada para cortar la calle.

También ha quemado bolsas de reparto y han gritado «esclavistas» y «explotadores» a los responsables de la empresa, informa Efe.