Giuseppe Conte dice adiós al Gobierno de Italia con un duro ataque a Salvini

María Signo ROMA / CORRESPONSAL

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Conte dirigió un duro discurso contra Salvini por haber desatado la crisis de Gobierno
Conte dirigió un duro discurso contra Salvini por haber desatado la crisis de Gobierno ETTORE FERRARI | Efe

El primer ministro dimitido acusó al líder de la Liga de «irresponsable y oportunista». El centroizquierdista PD dispuesto a dialogar sobre un posible Gobierno con el M5E

20 ago 2019 . Actualizado a las 21:26 h.

El Gobierno de Giuseppe Conte ha llegado a su fin. Con la presentación de su dimisión al presidente de la República, Sergio Mattarella, se pone punto final a catorce meses de coalición entre el Movimiento 5 Estrellas y la Liga. Así lo anunció el propio primer ministro italiano durante el debate de la moción de confianza presentada por su vicepresidente y líder de la Liga, Matteo Salvini. «Esta crisis socava la acción de este Gobierno que termina aquí», declaró en un durísimo discurso contra Salvini, al que tachó de «irresponsable» y «oportunista» por haber roto la coalición en un momento muy delicado. «Es una decisión objetivamente grave, que comporta consecuencias muy relevantes para la vida económica y social del país», dijo mientras recordaba que esta crisis pone a Italia en una situación de debilidad ante Europa en el momento en que se elige a los nuevos eurocomisarios.

Conte también mostró su preocupación por el deseo de Salvini de hacerse con «plenos poderes», así como por «invocar a la calle» como medio de presión. También criticó el hecho de que el líder ultraderechista no haya presentado ni su dimisión ni la de sus ministros de un Gobierno en el que no cree. Para el primer ministro, «hacer votar a las ciudadanos es la esencia de la democracia, solicitar el voto todos los años es irresponsable».

Tras aguantar el chaparrón sentado a la derecha de Conte, fue el turno de la réplica de Salvini. Con un «volvería a hacer lo mismo» inició un discurso duro y visiblemente nervioso que fue interrumpido en varias ocasiones por la oposición. «No tengo miedo de la opinión de los italianos. Quien tiene miedo no es un hombre libre y yo los soy», dijo justificando su propuesta de elecciones en octubre. En un tono electoralista insistió en que Italia no puede ser «esclava de nadie», en clara referencia a Bruselas, e invocando a la protección del Inmaculado Corazón de María, lo que le valió una monumental bronca desde los escaños de los partidos del centroizquierda.

Salvini retó al M5E y al Partido Democrático (PD) para que explique si existe un acuerdo de gobierno alternativo que «incumpliría la voluntad del pueblo italiano», dijo, al tiempo que deseaba a sus exsocios «suerte» en un ejecutivo con el ex primer ministro Matteo Renzi.

Puerta abierta

Al final dejó abierta una puerta al M5E, declarándose «disponible» a llevar a cabo algunas reformas constitucionales si después se vota. Por este motivo al final de la tarde la Liga anunció la retirada de la moción de censura. «La dimisión Conte no la hacen ya necesaria», explicaron.

Fue Renzi quien habló en nombre del PD aunque ya no ocupa ningún cargo en el partido. Se mostró abierto a un diálogo con Cinco Estrellas, pero adelantó que no tiene intención de participar en un hipotético Gobierno de coalición. En un comunicado, el secretario del PD, Nicola Zingaretti, aseguró que cualquier fase política nueva tiene que «tener en cuenta lo ocurrido estos meses». El PD se mantiene a la espera de lo que mañana decida el presidente Mattarella que, una vez aceptada la dimisión de Conte, iniciará a fase de consulta con los líderes políticos para ver si hay posibilidad de formar un nuevo Gobierno o si se adelantan las elecciones como piden Salvini y el centroderecha.