Las bases del PSOE aceptan por aplastante mayoría la coalición con Unidas Podemos

Gonzalo Bareño Canosa
Gonzalo Bareño MADRID / LA VOZ

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Fernando Alvarado | Efe

La militancia socialista aprobó por una abrumadora mayoría del 92 %, porcentaje que asciende al 94 % en Galicia, el preacuerdo alcanzado entre Sánchez e Iglesias. Los socialistas confían en el apoyo de ERC a la investidura sin descartar el del PP y Cs

24 nov 2019 . Actualizado a las 15:03 h.

La militancia socialista aprobó por una abrumadora mayoría del 92 %, porcentaje que asciende al 94 % en Galicia, el preacuerdo alcanzado entre el líder del PSOE y presidente del Gobierno en funciones, Pedro Sánchez, y el secretario general de Podemos, Pablo Iglesias, para formar un Ejecutivo de coalición. «¿Apoyas el acuerdo alcanzado entre el PSOE y Unidas Podemos para formar un Gobierno progresista de coalición?», es la pregunta que fue sometida al criterio de las bases, y cuya participación fue del 63,1 %, lo que supera en más de diez puntos a la habida en el 2016 (51,68 %) cuando Sánchez consultó el acuerdo con Cs.

La consulta no contemplaba el necesario apoyo de otras formaciones, previsiblemente la de los independentistas de ERC, para que ese Gobierno de coalición salga adelante. Sánchez, fue increpado desde un balcón por unos vecinos que le llamaron «traidor» y «vendido» cuando acudió a depositar su voto en la agrupación socialista de la localidad madrileña de Pozuelo.

La consulta a la militancia es la primera realizada conforme a la reforma de los estatutos del partido introducida por Sánchez en el 2017, que establecía la obligatoria consulta a la militancia de cualquier acuerdo de coalición con otras fuerzas. Pero ni el resultado de este referendo interno, ni el que está realizando Unidas Podemos garantizan que la investidura de Pedro Sánchez salga adelante.

Para ello, será necesaria la abstención o el voto a favor de ERC o el apoyo de Ciudadanos a que el líder del PSOE se convierta en presidente para cogobernar con el partido de Pablo Iglesias. Hipótesis esta última que parece complicada a la luz de las declaraciones de los líderes del partido naranja tras la renuncia de Albert Rivera.

Manos libres para Sánchez

La consulta deja manos libres a Sánchez para negociar la coalición con Unidas Podemos con los apoyos que considere necesarios. El primer secretario del PSC, Miquel Iceta, se mostró convencido de que esa coalición está capacitada para ofrecer diálogo en Cataluña e insistió en que España necesita «un Gobierno capaz de dialogar». Aún así, el secretario de organización del PSOE y ministro de Fomento en funciones, José Luis Ábalos, no renuncia a que la investidura se pueda alcanzar con el apoyo de otras fuerzas que ahora expresan su rechazo a hacer presidente a Sánchez, como el PP y Cs. Según indicó, el PSOE aspira a que «la derecha pueda participar en la operación de desbloqueo», ya que «todos ellos en campaña se comprometieron a no bloquear».

Al margen de que puedan alcanzar el respaldo de Unidas Podemos y además el del PNV, el Partido Regionalista de Cantabria, el BNG, el de Coalición Canaria y el de Teruel Existe, Ábalos cree que «evidentemente también tenemos que abrir otros procesos de futuro, que tienen que ver con conflictos que tenemos abiertos y que hay que empezar a abordar».

Respecto a las «líneas rojas» con ERC, insistió en que son «las de siempre: la legalidad, el respeto a la Constitución y a la integridad territorial del Estado». Recordó que el PSOE ha hecho también «un llamamiento a Ciudadanos» para facilitar la investidura sin depender de los independentistas. «No nos hemos dirigido solo a ERC. De hecho, nuestras primeras apelaciones han sido a los partidos que dicen que defienden la Constitución», aseguró Ábalos.

El PP tacha de paripé la consulta y Cs ve surrealista negociar con un imputado en el 1-O

El PP considera que la consulta organizada por el PSOE para que sus militantes decidieran si estaban de acuerdo o no con la formación de un Gobierno de coalición con Unidas Podemos es solo un «paripé» por parte del presidente del Gobierno en funciones, Pedro Sánchez. «Hemos tenido conocimiento de que Sánchez está negociando con los independentistas y han acordado formar una mesa de negociación para la investidura», señaló la vicesecretaria de organización del PP y presidenta del partido en Navarra, Ana Beltrán.

Los populares cuestionan que se negocie la investidura con ERC porque es un partido cuyos líderes «han sido condenados por sedición, por querer romper España», por lo que lo que Sánchez debería haber preguntado a sus bases es si creen que el PSOE «debe negociar y ceder ante las peticiones de los independentistas de Cataluña para ser investido».

Cs carga contra Sánchez

Ciudadanos cargó también contra la intención del Gobierno de sentarse en una mesa de negociación con ERC para pactar la investidura. El diputado de Cs en el Parlamento catalán Ignacio Martín Blanco tachó de «surrealista e indignante» que el presidente del consejo nacional de ERC e investigado por organizar el 1-O, Josep María Jové, forme parte de los equipos que liderarán esas negociaciones.

Martín Blanco criticó que «el futuro de España caiga en manos de quien ha dado un golpe», y acusó a Sánchez de poner el Gobierno en manos de quienes quieren romper al marco constitucional.