Sánchez espera cerrar en Barcelona el martes el voto de ERC a su investidura

Francisco Balado Fontenla
Fran Balado MADRID / LA VOZ

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Meritxell Batet, este viernes, durante su discurso con motivo del Día de la Constitución
Meritxell Batet, este viernes, durante su discurso con motivo del Día de la Constitución Ricardo Rubio

Da por cerrada la estructura del Gobierno y solo queda pendiente el pacto programático

07 dic 2019 . Actualizado a las 15:01 h.

Pedro Sánchez garantizó este viernes que, de producirse, el acuerdo entre el PSOE con ERC para que los independentistas allanen su investidura, será «constitucional», tal y como aseguró en los tradicionales corrillos entre políticos y periodistas que cada 6 de diciembre se organizan en el Congreso. El presidente del Gobierno en funciones está plenamente convencido de que la Carta Magna ofrece las herramientas suficientes para abordar los principales «conflictos sociales y políticos», entre los que destacó «la mancha» de la «crisis política y territorial» por la que atraviesa Cataluña.

Para el martes está previsto el tercer encuentro entre los equipos negociadores del PSOE y ERC, y, esta vez, ante la demanda de los secesionistas, se celebrará en Barcelona y no en el Congreso de los Diputados. «¿Cuál es el problema?», planteaban este viernes integrantes del Ejecutivo ante las preguntas de la prensa. 

Sin grandes obstáculos

El voto de los secesionistas continúa siendo decisivo para que el candidato socialista logre recabar la confianza de la Cámara y se ponga en marcha el Gobierno de coalición que tiene cerrado con Podemos. Según confirmó ayer el propio líder del Ejecutivo, la estructura y el reparto de carteras están ya completamente «cerrados», aunque no especificó si finalmente los de Iglesias dispondrán de tres o cuatro ministerios. La tarea pendiente ahora es alcanzar un acuerdo programático en el que ninguna de las dos formaciones aguardan que surjan grandes obstáculos. ¿Y para cuándo se fijará la votación de investidura? En el PSOE confían en que la reunión de Barcelona sirva para dar un acelerón definitivo al tema y poder fijar una fecha antes de la llegada de las Navidades. Se agarran a que cuanto antes se cierre menos «desgaste» sufrirán socialistas y secesionistas, viniendo a admitir que ni unos ni otros están cómodos. Sin embargo, el ministro de Fomento en funciones y secretario de organización del PSOE, José Luis Ábalos, reconocía esta misma semana serias dudas de que acabara saliendo adelante. Y mucho menos antes de enero o febrero.

En donde también han llegado las prisas es en Podemos. Las informaciones publicadas en los últimos días en las que se denuncia el cobro de sobresueldos en la cúpula del partido han supuesto todo un terremoto. 

Casado no se mueve del no

El Gobierno depende de la abstención de Esquerra, pero de no cuajar esta vía, Sánchez es consciente de que su escapatoria puede estar en la abstención del PP o Cs. Ayer puso el foco sobre los segundos, haciendo sangre de su batacazo electoral.

Por su parte, Pablo Casado volvió a insistir en que no acudirá en su socorro, aunque afirmó que tampoco veía a este llamando a su puerta, algo que considera un error del dirigente socialista, porque sería como más le comprometería. No obstante, el líder del PP dejó claro que en una «emergencia nacional» se pondrían de acuerdo para aplicar otro 155.

Batet defiende la Constitución como una herramienta para integrar y mirar al futuro 

«Quien defiende la Constitución debe esforzarse en integrar en ella y sus valores a quienes se puedan sentir alejados o excluidos». Estas palabras pronunciadas ayer en el Salón de Pasos Perdidos del Congreso por la presidenta de la Cámara Baja, Meritxell Batet, durante su discurso en el acto central del Día de la Constitución, sonaron a todo un aviso a Vox, cuyos representantes debutaban este año en la celebración del 6 de diciembre sin su presidente a la cabeza, que pasó la jornada en Barcelona.

La tercera autoridad del Estado pidió a la clase política mirar «al futuro», algo que consideró perfectamente posible dentro de las reglas de juego que acataron en 1978 una amplísima mayoría de españoles. «Es nuestra responsabilidad asumir el legado que recibimos para defender los preceptos de la Constitución, pero también para avanzar en el cumplimiento de sus objetivos y sus mandatos de transformación», afirmó en unas palabras que fueron muy en la línea con lo transmitido por Sánchez, quien inmediatamente después defendió que la solución al desafío secesionista era posible con la Carta Magna. 

La «cobra» de Celaá a Llop

Batet presidió los actos junto a la debutante Pilar Llop, que esta misma semana fue elegida presidenta del Senado y protagonizó una de las anécdotas de la jornada al haber sido víctima de «una cobra» por parte de su compañera de partido y portavoz del Gobierno, Isabel Celaá, en el ceremonial saludo de bienvenida: «Un percance me ha distraído, inmediatamente he llamado a la presidenta para transmitirle todo mi afecto», se disculpó esta.