El PSOE decanta la votación en el Congreso para que el ultraje y las injurias al rey sigan siendo delito

Francisco Balado Fontenla
Fran Balado MADRID / LA VOZ

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Unidas Podemos se posiciona a favor de la propuesta de ERC

28 oct 2020 . Actualizado a las 05:00 h.

Las calumnias e injurias a la Corona y el ultraje a España seguirán siendo delitos. El Pleno del Congreso rechazó ayer la proposición de ley registrada por ERC en la que instaba a la supresión en el Código Penal de estos delitos, y lo hizo gracias a una amplia mayoría en la que el posicionamiento del PSOE resultó determinante.

El voto de los socialistas se unió al del PP, Vox y Ciudadanos para hacer que la iniciativa de los republicanos no prosperase. Esquerra sí contó con el apoyo de la otra formación con presencia en el Gobierno, Unidas Podemos, cuyos miembros votaron, junto al resto de formaciones secesionistas, a favor de la despenalización de estas infracciones. Se repitió así una disonancia en el Ejecutivo respecto a la posición sobre la Corona, lo que es ya habitual en la Cámara Baja, y con la que ninguna de las dos fuerzas se muestra particularmente incómoda.

En el contexto de la polémica sobre la anulación del viaje de Felipe VI a Barcelona para presidir la entrega de despachos a los nuevos jueces, desde la bancada socialista argumentaron que no era el momento más indicado para abrir este melón. La gallega Isaura Leal, diputada por Madrid, aseguró que solo serviría para caer en «interpretaciones interesadas de los malintencionados», algo «nada deseable» cuando todos los esfuerzos debieran estar dirigidos a contener la pandemia.

El presidente del grupo de UP, Jaume Asens, lamentó la postura del PSOE, recordó que no es la primera ocasión en la que chocan, y aseguró que confía en que «a la tercera sea la vencida» para coincidir en un «horizonte republicano».

La diputada de ERC Carolina Telechea denunció la «medievalista sacralización» de la Corona por parte de algunas formaciones en su defensa de una iniciativa que encuadró en el marco de la libertad de expresión.

Contó con el infructuoso apoyo del BNG. Néstor Rego expuso desde la tribuna cuatro víctimas de «una legislación represiva. El caso más reciente, el de Ana Pontón, portavoz nacional de la formación frentista, a la que la Fiscalía archivó una investigación abierta «por decir lo que todos sabemos: los Borbones son ladrones y corruptos». También recordó a uno de sus predecesores en el escaño, Francisco Rodríguez, condenado a dos años de cárcel por quemar una bandera. A otro profesor, Francisco Carballo, por editar un libro denunciando el asesinato de Moncho Reboiras. Y se remontó a 1980 para recordar el caso por el que el cantautor Suso Vaamonde fue condenado a seis meses de cárcel por injurias por su canción ¡Uah!, que dice: «Cando me falan de España sempre teño una disputa, se España é miña nai, eu son un fillo de puta».

Batet será inflexible con los tiempos de cada intervención 

Los diputados tendrán que estar más pendientes del reloj para ajustar al máximo sus intervenciones. La presidenta del Congreso, Meritxell Batet, trasladó en la reunión de la Junta de Portavoces que será más intransigente con el tiempo, y que las participaciones deberán ceñirse a lo que marca el reglamento. Los que tuvieron el uso de la palabra ayer ya pudieron comprobarlo. 30 segundos antes de terminar el turno, ya fueron advertidos.