Las anomalías por el cambio climático siguen sucediéndose en muchas partes del mundo, y preocupa especialmente la situación en el Círculo Polar Ártico
14 nov 2020 . Actualizado a las 13:25 h.La pandemia del covid-19 está ocultando los efectos de otra crisis que seguirá aquí cuando el coronavirus haya desaparecido de nuestras vidas: el cambio climático. Las anomalías siguen sucediéndose, una tras otra, en muchas partes del mundo. En el hemisferio norte resulta realmente preocupante la situación que se vive en el Círculo Polar Ártico, donde desde enero se han estado registrando temperaturas muy altas. En Rusia ya se refieren al 2020 como el «Año sin Invierno». Los valores extremadamente altos han provocado que la temporada de deshielo se adelantase y fuese especialmente intensa, con un retroceso de la capa helada solo superado en el 2012, que ostenta el récord.
Con la llegada del otoño, lo habitual en el extremo norte del hemisferio boreal es que el hielo vaya avanzando, pero no lo está haciendo como debería porque el termómetro sigue alcanzando máximas muy poco habituales. El pasado miércoles 11 de noviembre, en el archipiélago noruego de Svalbard, la región poblada más al norte del mundo, una estación meteorológica situada en la montaña de Reindalspasset registró un valor de 9,4 grados.
Este récord llega después de que en la mayor parte del Ártico oriental y Siberia se hayan medido anomalías de temperatura de hasta 20 grados por encima de la media desde finales del verano. No parece, por tanto, un caso aislado, sino más bien los efectos de un año que está siendo realmente extremo y que a nivel global puede acabar siendo el más cálido desde que existen registros.
Otra de las anomalías destacadas se encuentra en el Atlántico, donde las aguas cálidas han disparado la actividad ciclónica hasta niveles nunca antes vistos. Galicia será testigo durante los próximos días de las consecuencias. La tormenta tropical Theta, la número 19, permitirá que a comienzos de la semana que viene se registren valores muy altos para el período del año, más propios de una primavera avanzada. La previsión no descarta que las máximas puedan ascender hasta los 25 grados.
Antes de la llegada del aire subtropical, este fin de semana se espera un tiempo marcado por las influencias oceánicas. Hoy será una jornada de cielos parcialmente cubiertos con más nubes cuanto más al oeste de la comunidad, donde habrá lluvias de carácter débil. Mañana, un frente muy activo atravesará Galicia durante la primera mitad del día, dejando cielos cubiertos por la mañana, con precipitaciones que serán más cuantiosas cuanto más al oeste. Ya por la tarde, las lluvias quedarán en forma de chubascos ocasionales. Las temperaturas mínimas sufrirán un ligero ascenso, mientras que las máximas continuarán sin cambios.