Sánchez afirma que Abascal demuestra «más sentido del Estado» que Casado

Francisco Balado Fontenla
Fran Balado MADRID | LA VOZ

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Chema Moya | EFE

Rufián equipara a Salvador Illa con un yogur: «O se vota en febrero o caduca»

03 feb 2021 . Actualizado a las 17:31 h.

Continúa en aumento la tensión entre el PSOE y ERC, socio clave para que Sánchez lograse la investidura y aprobase los Presupuestos. La proximidad de las elecciones catalanas ha supuesto que los independentistas intensificaran sus ataques contra el presidente del Ejecutivo, hasta el punto de que su portavoz en el Congreso, Gabriel Rufián, acusó este miércoles en la Cámara baja al presidente de «priorizar votos por encima de vidas», denunciando un supuesto interés de los socialistas por celebrar los comicios el próximo domingo 14 de febrero en lugar de aplazarlos, como pidieron el resto de formaciones del arco parlamentario catalán. Según Rufián, para tratar de capitalizar el «efecto Illa», a quien comparó con «un yogur», porque, o «se le vota en febrero o caduca».

Rufián expuso en la sesión de control que los comicios gallegos y vascos previstos para la pasada primavera fueron aplazados con 184 casos por cada 100.000 habitantes, mientras en Cataluña, rondando los 600 contagiados, se sigue adelante con el proceso electoral.

El Govern pidió el aplazamiento, pero el Tribunal Superior de Justicia de Cataluña lo rechazó, considerando que el marco legal no era el apropiado, una decisión que Rufián achacó al Gobierno. «Sus jueces han convocado las elecciones, pero les puedo asegurar que los catalanes decidirán quienes ganan. Usted no van a convertir la Generalitat de Cataluña en un despacho de Moncloa», dijo Rufián, dirigente de un partido que se ve obligado a endurecer su mensaje contra el Gobierno ante la creciente presión de Puigdemont, que los acusa de colaboracionistas con Moncloa. 

Sánchez negó que el Gobierno estuviese detrás de la decisión de seguir adelante con el 14-F. «No es cierto. Ustedes eligieron la fecha, la responsabilidad es de ustedes (ERC) y de Junts, de ningún otro», advirtió. Además, ante los ataques de Rufián por prescindir del ministro de Sanidad en «lo peor» de la tercera ola de la pandemia, Sánchez afirmó que Illa «no se va de vacaciones a Cataluña», sino que «vuelve a hacer frente a la mayor emergencia sanitaria y económica», es decir, a luchar contra el virus, pero desde otro cargo, y también para intentar «superar» la «confrontación» entre bloques. «¿Qué les molesta más, que deje de ser el ministro de Sanidad o que sea el candidato a la Generalitat?», cuestionó. Desde que se oficializó la candidatura de Illa a la Generalitat los apoyos del PSC en todos los sondeos se dispararon hasta el punto de disputar ERC y a la fuerza de Puigdemont convertirse en la opción más votada. 

Vox, el nuevo socio de la coalición Frankenstein

Pero la sesión de control al Gobierno no se limitó a las elecciones catalanas. El PP preguntó con insistencia por las razones por las que se había «arrancado» el informe del Consejo de Estado del decreto que el Ejecutivo logró aprobar la pasada semana y mediante el que se organizará el reparto de los 140.000 millones de euros procedentes de Bruselas. «Conteste. ¿Por qué ha mutilado un informe del Consejo de Estado? Dígalo ya, o el que calla otorga», dijo Pablo Casado en el turno de réplica ante la falta de una respuesta de Sánchez. La portavoz parlamentaria del Grupo Popular, Cuca Gamarra, insistió con el asunto cuestionando a Carmen Calvo. También el secretario general del PP, Teodoro García Egea, que preguntó al vicepresidente segundo, Pablo Iglesias: «No me ha contestado. ¿Dónde está el informe del Consejo de Estado del decreto de los fondos europeos?». 

Sánchez acusó a Casado de acudir a las Cortes «a decir mentiras», invitándole a abandonar «la mala sombra» que le caracteriza desde que se hizo con las riendas del PP, recomendándole que abandone «la confrontación» y opte por hacer «una oposición útil y constructiva». Sánchez aseguró que el líder de Vox, Santiago Abascal, «en algunos momentos de destello demuestra más responsabilidad del país y más sentido del Estado que el líder de la oposición».

El presidente del Gobierno se refería a la abstención de Vox de la pasada semana que permitió al Gobierno convalidar el decreto del reparto de ayudas de los fondos europeos, otro de los asuntos que empleó la bancada popular para cargar contra el Gobierno, pero especialmente contra sus competidores en la parte derecha del tablero político. «Tanto sacar la foto de Colón que se ha metido en la foto del Capitolio, cualquier día le vemos con cuernos de bisonte», le espetó Casado a Sánchez. Gamarra y García Egea se refirieron a Vox como el «nuevo socio de la coalición Frankenstein». «Vox y el Gobierno se necesitan, se retroalimentan», denunció el secretario general del PP.