4M: Más Madrid rechaza la candidatura conjunta de la izquierda que reclama Pablo Iglesias e irá a las urnas con una lista propia
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La líder de Más Madrid, Mónica García, avisa de que «las mujeres estamos cansadas de hacer el trabajo sucio para que, en los momentos históricos, nos pidan que nos apartemos». Y lanza una advertencia general: «Madrid no es una serie de Netflix»
16 mar 2021 . Actualizado a las 20:09 h.Los deseos del, por ahora, vicepresidente Pablo Iglesias de unir a la izquierda no se han cumplido. Más Madrid concurrirá con una lista propia encabezada por Mónica García a las elecciones del próximo 4 de mayo a la Asamblea de Madrid. De esta forma, el partido de Íñigo Errejón rechaza la candidatura conjunta de la izquierda que planteó ayer el líder de Unidas Podemos, tras anunciar que dejaba el Gobierno de coalición.
«Disponer de tres opciones con garantías de representación es la mejor forma de movilizar», asegura García en un vídeo remitido a los medios tras una reunión de urgencia de la ejecutiva regional de Más Madrid hoy a las ocho de la mañana.
La líder de Más Madrid, Mónica García, dice que es preferible que concurran a las elecciones los tres partidos de izquierda por separado y avisa de que «las mujeres estamos cansadas de hacer el trabajo sucio para que, en los momentos históricos, nos pidan que nos apartemos. Hemos demostrado con creces que sabemos frenar a la ultraderecha sin necesidad de que nadie nos tutele».
«Quiero presentarme a las elecciones y ser la próxima presidenta de la Comunidad de Madrid. Me apetece, tengo buenas ideas y mucho trabajo a la espalda», subraya García en el vídeo, en el que también lanza esta advertencia general a todos sus rivales políticos: «Madrid no es una serie de Netflix».
«A la irresponsabilidad de Ayuso de convocarnos a unas elecciones una pandemia no podemos sumarle ni más frivolidad, ni más espectáculo, ni más testosterona», ha dicho Mónica García. En su opinión «ya está claro que todas las opciones superan la barrera del 5 % y por lo tanto, no hay que temer que se desperdicie ni un solo voto».
García ha defendido que «una vez en marcha y activadas todas las fuerzas progresistas» no pueden «perder ni un solo minuto», y ha añadido: «Dedicarnos a mirarnos el ombligo, a hablar de nosotros mismos o darnos golpes de efecto nos desvía de lo más importante, que es echar a Ayuso y a la ultraderecha» de la Presidencia de la Comunidad de Madrid.
El dirigente de Más País Íñigo Errejón ha apoyado la candidatura en solitario de Mónica García y ha incidido en que «el feminismo» es hoy el protagonista, informa Efe. Errejón ha retuiteado en su cuenta de Twitter el vídeo de Mónica García y ha escrito que «el feminismo nos ha enseñado que no siempre tenemos que ser los protagonistas. Así que hoy, esto: vamos @Monica_Garcia_G».
Alberto Garzón critica el «error notable» de Más Madrid
El ministro de Consumo y líder de IU, Alberto Garzón, ha calificado de «error notable» el rechazo de Más Madrid a la oferta lanzada por Pablo Iglesias de formar una candidatura conjunta para estos comicios. «Esta decisión es un error notable. La unidad no es la respuesta a todo, pero es un estímulo que permite hacer las cosas diferentes aL 2019: entonces gobernó Ayuso. Esta nueva ocasión requería unidad y humildad. Dicho esto, mucha suerte a quienes han pensado y decidido lo contrario», ha apuntado Garzón a través de un comentario en Twitter.
Precisamente IU Madrid abogó por la candidatura única de izquierda cuando se conocieron los planes de la presidenta regional, Isabel Díaz Ayuso, de adelantar los comicios de Madrid, informa Europa Press. A su vez, Garzón fue uno de los nombres que sonó como posible candidato en el espacio político antes de que se conociera la sorpresiva decisión de Iglesias de dejar su cargo de vicepresidente para ser candidato a las elecciones generales.
Por su parte, la diputada en el Congreso y representante de En Comú Podem, Aina Vidal, ha subrayado que los argumentos dados por Más Madrid para su negativa a esta confluencia son «deshonestos», dado que el paso de Iglesias ya garantizaba a Unidas Podemos obtener el 5% y se trataba de movilizar más al votante de izquierdas con una candidatura en la que se sintieran «a gusto» todos.
