Rusia propone declarar una semana no laborable en todo el país para frenar la pandemia

La Voz REDACCION/LA VOZ

ACTUALIDAD

YURI KOCHETKOV

Las autoridades rusas han notificado un nuevo récord de fallecimientos y más de 33.000 contagios en las últimas 24 horas

19 oct 2021 . Actualizado a las 17:51 h.

Las autoridades de Rusia han notificado este martes un nuevo máximo diario de muertes por coronavirus, que ya superan el umbral de las 225.000 desde el inicio de la pandemia. En medio de este drástico repunte de cifras, el Gobierno ruso ha propuesto declarar una semana no laborable en todo el país para frenar el avance del virus. Una medida que se implementará del 30 de octubre al 7 de noviembre, según ha informado hoy la  viceprimera ministra rusa, Tatiana Golíkova. La restricción incluso se adelantará al sábado 23 en las regiones del país con mayor número de contagios.

El primer ministro, Mijaíl Mishustin, calificó la medida de «difícil, forzosa y necesaria».«El número de enfermos crece y es necesario contener el avance de esta peligrosa infección», señaló, al indicar que se mantendrá el uso de mascarillas y distanciamiento social obligatorio en los espacios públicos.

Lo cierto es que las cifras notificadas por las autoridades hacen evidente que la pandemia se encuentra descontrolada en el país. El centro operativo nacional para la lucha contra el coronavirus ha detallado que durante las últimas 24 horas se han detectado 33.740 casos y 1.015 decesos, lo que eleva las cifras totales a 8.060.752 y 225.325, respectivamente. El número de muertos supone la segunda vez en la que Rusia suma más de mil víctimas en un día.

La jefa sanitaria rusa, Anna Popova señaló que en estos momentos se observa un «crecimiento prácticamente simultáneo» de los contagios en todas las regiones, al explicar que durante la semana pasada se detectaron un 15,5 % de nuevos casos más que en la anterior. «El desarrollo de la situación epidémica exige un mayor número de medidas y una reacción mucho más rápida», urgió.

Vacunación lenta

Las autoridades achacan el aumento de los casos no solo a la mayor agresividad de la variante delta del coronavirus y la coincidencia con la temporada de la gripe, sino también al bajo ritmo de vacunación. La propia Popova señaló que 63 de las 85 regiones rusas han impuesto la vacunación obligatoria para «determinadas categorías de ciudadanos».Sin embargo, hasta el momento, en todo el país han recibido la pauta completa de vacunación tan solo el 32,3 % de la población, una cifra insuficiente para alcanzar la inmunidad de rebaño.