La complicada tarea de buscarle casa al rey emérito

Gonzalo Bareño Canosa
Gonzalo Bareño MADRID / LA VOZ

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Juan Carlos I, en una imagen de 2017 en Baiona (Pontevedra), donde participó en la regata Príncipe de Asturias
Juan Carlos I, en una imagen de 2017 en Baiona (Pontevedra), donde participó en la regata Príncipe de Asturias M.MORALEJO

Juan Carlos I quiere volver a España cuanto antes y, aunque Zarzuela y Moncloa no se han pronunciado, se especula ya con varios lugares en los que podría fijar su residencia

18 dic 2021 . Actualizado a las 15:27 h.

Juan Carlos I aseguraba en un libro publicado el pasado mes de septiembre que había recibido «muchas presiones» y ante ello decidió exiliarse en Abu Dabi para «no molestar a la Corona». Pero un año y medio después, la situación ha dado un giro. Ahora lo que parece molestar no solo a su hijo Felipe VI, sino también al Gobierno, es su deseo de regresar a España. El emérito considera que una vez archivada la investigación sobre él en Suiza, y con expectativas de que la Fiscalía española haga lo mismo, puede volver con normalidad. E incluso, recuperar su estatus anterior. Es decir, su residencia en el Palacio de la Zarzuela y la percepción de una asignación por parte de la Casa Real para sufragar sus gastos, con cargo a los fondos públicos, que el actual jefe del Estado le retiró en marzo del 2020.

Ninguna de las dos posibilidades es contemplada ni en la Casa Real ni en el Gobierno. En el Ejecutivo se considera que destinar dinero público a la manutención de Juan Carlos I solo serviría para reforzar la polémica y aumentar las críticas de quienes atacan a la institución de la Corona, incluida Unidas Podemos, socio en el Ejecutivo de coalición.

Y, aunque oficialmente el Gobierno deja en manos de la Casa Real el posible regreso del emérito y su lugar de residencia, la hipótesis de que Felipe VI celebrara audiencias o despachara sus asuntos oficiales en Zarzuela mientras Juan Carlos I reside en ese mismo edificio se considera descabellada.

No es consciente de cambio en la opinión pública

El rey emérito ha expresado a sus próximos su voluntad de regresar cuanto antes. No de manera definitiva, pero sí para pasar «una temporada». Una estrategia que serviría para comprobar qué grado de desafección genera su vuelta, a la espera de decidir sobre su vuelta definitiva. Para quienes se oponen a su retorno, Juan Carlos I no parece ser consciente del giro que ha dado la opinión pública en España respecto a su figura, que antes de conocerse sus supuestas irregularidades fiscales y de que se aireara su relación con Corina Larsen gozaba de gran aceptación.

Pero, ante la posibilidad de que Juan Carlos I acabara forzando su regreso, se ha especulado con varias ideas sobre los lugares en los que podría fijar su residencia. Una de ellas es la de que viva en alguno de los edificios que pertenecen a Patrimonio Nacional, aunque esa posibilidad tendría el mismo problema de sufragar su estancia con cargo al erario público. La otra hipótesis es que se aloje en una propiedad de alguna de sus amistades, como ocurre ahora mismo en Abu Dabi, en donde es invitado del príncipe heredero del Emirato, el jeque Mohammed Bin Zayed.

Se ha hablado de la finca Dehesa de los Llanos, en Albacete, perteneciente a Carlos Gutiérrez-Maturana-Larios Altuna, marqués de Paul, en la cual se hospedó Juan Carlos I cuando era joven. Pero la idea más plausible sería la de alguna villa en Portugal perteneciente a una familia amiga de la Corona. Algo que le permitiría hacer visitas a Galicia. Antes de partir de España, el emérito se reunió en Sanxenxo con sus amistades y les aseguró que volvería pronto.

A la espera de que se decida su posible retorno, según la periodista Pilar Urbano, experta en la Casa Real, la reina Sofía estaría dispuesta a cenar con Juan Carlos I el día de Nochebuena, en Londres o en algún otro país.