Humala ingresa en la prisión de los presidentes
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El escándalo Odebrecht hace caer al expresidente de Perú, condenado a quince años de cárcel por blanqueo de capitales
17 abr 2025 . Actualizado a las 05:00 h.Barbadillo, la cárcel peruana de los expresidentes, tiene desde este martes un nuevo inquilino. Ollanta Humala (2011-2016) será internado en el distinguido reclusorio, situado a las afueras de Lima, después de haber sido condenado a 15 años de prisión por blanqueo de capitales. Tendrá dos compañeros de cárcel que también han ocupado el puesto más alto de la política peruana: Alejandro Toledo (2001-2006), sentenciado a 25 años de prisión por corrupción; y Pedro Castillo (2021-2022), procesado por rebelión tras haber cerrado el Congreso en el 2022, e investigado también en casos de corrupción. Barbadillo se creó en el 2007 para acoger al autócrata Alberto Fujimori (1990-2000) después de su extradición desde Chile. Iba a ser un espacio temporal, porque se estaba construyendo una nueva prisión en Callao, pero acabó siendo permanente y el exmandatario pasó allí su condena a 25 años por crímenes contra la humanidad hasta que salió indultado en diciembre del 2023, unos meses antes de su fallecimiento.
El reclusorio cuenta, según El Comercio, con enfermería, sala de televisión, elementos de pintura que solía usar Fujimori, cocina, patio y un biohuerto. Seis personas trabajan allí por turno.
La condena a Humala por haber aceptado ilegalmente sumas millonarias para sus campañas de la Venezuela de Hugo Chávez y de la gigante brasileña de la construcción Odebrecht —Toledo también fue condenado por sobornos de esa compañía— no es algo insólito en Perú. Todos los ex presidentes peruanos, salvo tres transitorios, desde 1986, han sido procesados por corrupción. Alan García, predecesor, a la vez, de Fujimori y Humala, se suicidó en el 2019, instantes antes de ser detenido por el caso Odebrecht. Pedro Pablo Kuczynski (2016-2018) y Martín Vizcarra (2018-2020) también son procesados por corrupción. Incluso la actual presidenta, Dina Boluarte, que gobierna desde el 2022, tiene abierto un caso por haber aceptado supuestamente relojes de alta gama.
Boluarte está, de nuevo, en el disparadero porque en la madrugada del miércoles le dio un salvoconducto a la esposa de Humala, Nadine Heredia, también condenada a 15 años de cárcel por blanqueo, para que se asilase en Brasil. Los testigos dijeron que la ex primera dama salió de la embajada de Venezuela en Lima con maletines cargados de billetes. Heredia escuchó su veredicto a través de videoconferencia. Una orden de arresto fue expedida en su contra, pero ella se refugió minutos después en la embajada de Brasil, donde solicitó asilo, que le fue concedido durante la madrugada del miércoles por el Gobierno de Lula da Silva, condenado también en el marco de la investigación Odebrech, una sentencia revocada en el 2021, tras 580 días, porque el Supremo entendió que no se habían respetado sus derechos procesales. Un avión de la Fuerza Aérea Brasileña llevó a Heredia al país vecino antes del amanecer, mientras su marido pasaba sus primeras horas como el inquilino número tres de la cárcel de los expresidentes.