Los alumnos asturianos «piran» más que en los países desarrollados

S.D.M. REDACCIÓN

ASTURIAS

PACO RODRÍGUEZ

El informe Pisa determina que el absentismo escolar en el Principado es superior a la media nacional y a la OCDE. Está relacionado con un descenso en los resultados

13 dic 2016 . Actualizado a las 05:00 h.

Los alumnos asturianos piran más que la media en España e, incluso, más que la media de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE). Este dato podría resultar anecdótico si no fuera porque el absentismo escolar está directamente relacionado con la obtención de peores resultados. Estas dos conclusiones sobresalen del informe Pisa 2015 que se acaba de publicar y que tiene un apartado destinado al contexto en el que viven los estudiantes que participan en su investigación. Mediante encuestas determinan desde su entorno socioeconómico a su motivación o los días que han faltado a clase.

Los porcentajes demuestran estas deducciones. El cuestionario Pisa preguntaba a los estudiantes de 15 años, que es a los que se les realizó la prueba, el número de veces que, durante las dos últimas semanas, habían faltado a clase un día entero o a alguna asignatura concreta. Por orden ascendente, reconocieron haber faltado un día entero el 19,7% de los alumnos del conjunto de la OCDE, el 24,7% de los españoles y el 26,44% de los asturianos. En cambio, hasta casi el 30% de los asturianos admitieron haberse saltado alguna hora suelta. El problema es especialmente llamativo en España y los datos del Principado son aún peores. 

Precisiones

La conclusión sobre el absentismo solo requiere una matización. No se entra en la causa de la ausencia, si está o no justificada, si es conocida por la familia, si se debe a alguna enfermedad, a una visita al médico o a alguna razón complementaria. Pisa incluye en el mismo saco todas las variantes, lo que lleva a asimilar una falta puntal y justificada a la asistencia irregular, repetida e injustificada. El fundamento es que, sea el motivo por el que sea, es un riesgo para el correcto aprendizaje, los resultados son peores y, además, puede derivar en el abandono educativo temprano, uno de los grandes problemas contra los que luchan los países de la OCDE.

El Principado puntualiza en su resumen que solo el 7% de los alumnos de 15 años presenta conductas absentistas. Ese 7% coincide con los estudiantes que en las dos semanas anteriores a la prueba faltaron tres días o más al instituto. De hecho, la Consejería de Educación hace hincapié en la brecha que se abre entre esos que manifiestan mayor absentismo y los que no tienen faltas de asistencia. Puede llegar a los 85 puntos. 

Relación ausencias y notas

Pese a tener esta precisión en mente, los datos asturianos siguen siendo peores. La progresión es, además, evidente. Pisa lo mide en el apartado de la competencia científica. Los estudiantes que han acudido todos los días a clase consiguen de media un resultado de 510, sobre una media ponderada de 500. En cambio, los que habían faltado uno o dos días bajaron a 491, es decir, muy por debajo de la media. Los que piraron entre tres y cuatro días, se quedaron en 478 y lo de cinco o más, cayeron a 424. Estos últimos, esos que en las dos últimas semanas no habían acudido a clase más de la mitad del tiempo, solo representan el 3% del total. 

Aunque saltarse horas puntuales puede parecer menos grave que faltar un día entero, la memoria de Pisa ve en ambos casos un retroceso de las notas similar. Se vuelve a tomar como referencia los 510 puntos de los que asistente siempre a clase. Los que no han asistido a una o dos clases en las dos últimas semanas bajan a 493. Los que se saltaron tres o cuatro apenas logran 474. Y los que perdieron cinco o más caen a 438 puntos. 

Conclusiones

Los efectos del absentismo van mucho más allá que el mero descenso de los resultados escolares o del retraso en el aprendizaje. El informe Pisa señala tienen más posibilidades de tener trabajos peor remunerados cuando accedan al mercado laboral, que mantienen relaciones más peligrosas con las drogas o el alcohol, e incluso con los embarazos no deseados.  

Además no solo repercute en el alumno que pira. «Daña a la clase entera», explica el estudio. La razón es que esos estudiantes requieren una atención especial del profesor, para ponerlos al día. Y también que son modelos de conducta que otros pueden tender a imitar.