Tejerina intentará suavizar el tijeretazo de Bruselas a las cuotas de merluza y rape

Europa Press REDACCIÓN

ASTURIAS

Un pesquero en Cudillero
Un pesquero en Cudillero

La ministra de Agricultura asegura que cuenta con argumentos «científicos» y sobre repercusiones «socioeconómicas» para mantener los cupos

12 dic 2016 . Actualizado a las 18:22 h.

La ministra de Agricultura, Pesca y Alimentación y Medio Ambiente, Isabel García Tejerina, ha confiado este lunes en que la Comisión Europea sea «sensible» al impacto socioeconómico para el sector pesquero y atenúe los recortes que defiende para el próximo año en las posibilidades de pesca de especies de interés para España, como son la merluza ibérica y el jurel del Cantábrico. La propuesta de Bruselas limita los aumentos a especies particularmente interesantes en Asturias como la merluza del Norte (del 2,8%), el rape capturado en el Cantábrico (con una reducción del 11,9%,). Además, en el caso de la cigala capturada en el Cantábrico, Bruselas propone eliminar las posibilidades de pesca. Otra especie para la que la propuesta recoge importantes recortes es el gallo. La Comisión Europea pide reducciones del 25,7% en aguas ibéricas, del 28,2% en el Gran Sol y del 16% en el caso de los caladeros frente a la costa francesa. También plantea una reducción del 20% en el caso del merlán que se captura en el Cantábrico y al Oeste de Francia.

«Mejorar (las cuotas de pesca) de la merluza sur y del jurel oeste son de las prioridades en este consejo», ha indicado Tejerina en Bruselas, a su llegada a la reunión de dos días en la que los ministros de Pesca de la UE deben negociar y pactar los Totales Admisibles de Capturas (TAC) y cuotas para la flota comunitaria en 2017. En el que es el consejo de ministros europeos más importante del año para el sector, España aspira a suavizar los recortes del 36 % para la merluza del Sur y del 45 % para el jurel cantábrico que figuran en la propuesta inicial para la negociación.

En opinión de la delegación española, hay informes socioeconómicos que deben ser valorados con la misma consideración que se da a los datos científicos, que establecen el estado de los recursos pesqueros, tal y como establece la Política Pesquera Común (PPC). Otro de los argumentos que defenderá la delegación española es permitir «flexibilidad» en los objetivos de Rendimiento Máximo Sostenible (RMS) para ciertas especies, como la de la merluza, cuyo plazo para lograrlo está fijado en 2017.

España cree que hay margen para aplazar el calendario hasta 2018, al menos para la pesca de la merluza sur, y sostiene que la PPC defiende como «gran objetivo» el RMS, pero también otros elementos como «la consideración de otros criterios y la posibilidad de aplazamiento». «El objetivo es irrenunciable, también para España, pero creemos que lo razonable, lo sensible y lo que voy a defender, es que este objetivo no sea incompatible con defender los intereses socioeconómicos de los pescadores españoles», ha resumido Tejerina.

Así, ha insistido, las posibilidades de pesca «tienen que estar basadas sobre la información científica y sobre los criterios de la PPC», lo que «implica» que se valore también cómo afectarían en la actividad de la flota y la comunidad pesquera. «Hemos tenido sólidos informes socioeconómicos para aportar a la Comisión y, sobre esa base, esperamos que sea sensible a los argumentos de España», ha añadido.

Además de rebajar los grandes recortes que promueve Bruselas, España espera poder mejorar las posibilidades que se contemplan para otros stocks no sometidos a recortes, como son el rape norte, las rayas y el gallo sur. Son especies «importantes», que cuentan con buenos datos de biomasa, según la ministra, que también ha confiado en «mantener» la anchoa en aguas ibéricas. Finalmente, Tejerina insistirá en la necesidad de permitir una mayor «flexibilidad» con los estrictos cupos que se asignan a las especies de estrangulamiento, para evitar que la pesca accesoria pueda obligar a una flota a amarrar.

España propone alternativas como el intercambio con algunas especies, para que poder obtener más margen con especies para las que la cuota es «nula o muy pequeña» a cambio de cuota en otros recursos para los que la flota tiene «mayor holgura» y su recorte no afectaría tanto al sector.

Las propuesta de la Comisión

La propuesta de Bruselas limita los aumentos a la merluza del Norte (del 2,8%), el rape capturado en el Cantábrico y en aguas frente a la costa de Portugal y el Golfo de Cádiz (54%), el lenguado del Canal de la Mancha (20,3%), el abadejo de aguas ibéricas (6,8%) y la cigala y el jurel de aguas portuguesas (5% y 6,9%, respectivamente).

Por el contrario, el Ejecutivo comunitario ha reclamado recortes en los stocks de otras especies dada su «preocupante» y «vulnerable» situación según consta en las evaluaciones científicas.

Dentro de este grupo se encuentra el rape del Norte, con una reducción del 11,9%, el bacalao del Norte y de aguas ibéricas (-68,3%), y en lenguado en el mar de Irlanda, con recortes de entre el 30% y el 82%. En el caso de la cigala capturada en el Cantábrico, Bruselas propone eliminar las posibilidades de pesca.

Otra especie para la que la propuesta recoge importantes recortes es el gallo. La Comisión Europea pide reducciones del 25,7% en aguas ibéricas, del 28,2% en el Gran Sol y del 16% en el caso de los caladeros frente a la costa francesa. También plantea una reducción del 20% en el caso del merlán que se captura en el Cantábrico y al Oeste de Francia.

No obstante, la propuesta mantiene sin cambios las posibilidades de pesca para anchoa o boquerón en el Golfo de Cádiz y en aguas frente a la costa portuguesa, así como para algunos caladeros de bacalao, gallo, lenguado y platija.