Las discotecas denuncian más de 30 fiestas ilegales de Nochevieja

Graciela M. Camporro REDACCIÓN

ASTURIAS

Fiesta de cotillón
Fiesta de cotillón

La asociación basa sus reclamaciones en la falta de licencia para la música en directo y la promoción de bebidas alcoholicas. También investiga alquileres para cotillones privados

30 dic 2016 . Actualizado a las 05:00 h.

Decir Nochevieja es decir fiesta. Ese día muchos salen a la calle a festejar el fin de año y dar la bienvenida a uno nuevo. Los cotillones no han pasado de moda, aunque tienen diferentes versiones. Mientras unos prefieren disfrutar de una agradable cena y baile junto a su familia en un hotel o restaurante, otros se decantan por una una barra libre y música en directo o un DJ. Todo vale a la hora de celebrar el cambio de año, aunque en algunos casos la legalidad sea dudosa. La Asociación de Empresarios de Salas de Fiesta, Baile y Discotecas de Asturias ha denunciado que muchos de estas celebraciones no cumplen con la normativa vigente y, por tanto, son ilegales. En total, el colectivo ya ha presentado más de 30 denuncias en las que esgrimen principalmente dos motivos: la promoción de alcohol y la presencia de música en directo en locales que no disponen de la licencia pertinente. Ha añadido, además, que este tipo de eventos no cumple las medidas de seguridad exigidas y que pueden poner un peligro a los clientes. «Si tuviéramos constancia de todas las fiestas que se van a celebrar, la cifra de denuncias sería muy superior», afirma el abogado de la asociación, Pedro Fanjul, que no descarta formalizar más reclamaciones antes de mañana por la noche.

Actuación+barra libre

Asturias cuenta con una amplia variedad de cotillones para todos los perfiles de público en los que celebrar la bienvenida de un nuevo año. Hoteles y restaurantes ofrecen a sus clientes la opción de disfrutar de una cena, baile y barra libre. La asociación ha explicado que este tipo de fiestas están fuera del marco legal porque no disponen de una licencia adecuada. Por otra parte, otros establecimientos carecen de licencia para organizar conciertos de música en directo. Por esta razón, ha interpuesto más de 30 denuncias, contra establecimientos diseminados por toda la región. Esta cifra podría elevarse ya que siguen investigando eventos que se están ofertando por otras vías como pueden ser las redes sociales.

Fanjul ha asegurado que las actuaciones con música en directo en recintos no adecuados pueden suponer un riesgo para la seguridad de los asistentes porque carecen de las medidas pertinentes. «La gente que tiene licencia para todo este tipo de eventos y actividades tienen que pagar por ella una gran cantidad de dinero. Muchos de los que celebran estas fiestas no disponen de salidas de emergencias, no tienen contratada seguridad y si sucediese una desgracia, sus seguros no lo cubrirían», ha apuntado. La asociación ha exigido, además, a la administración que adopte las medidas pertinentes y que «no mire hacia otro lado».

Otra de las denuncias de este colectivo tiene que ver también con el alquiler de locales y bajos comerciales para cotillones privados. Son muchos los que deciden entre un gran grupo de amigos o familiares alquilar un pequeño establecimiento para reunirse y celebrar todos juntos el fin de año. El abogado de la asociación ha asegurado que esta actividad es completamente ilegal y que ni siquiera tienen la licencia pertinente para poner música con amplificadores.

Una nueva normativa

La base legal de la mayor parte de las reclamaciones de los dueños de discotecas y salas de fiestas es la ley 4/2015 del Principado, de 6 de marzo, que regula la atención integral en materia de drogas y bebidas alcohólicas. Esta normativa no solo prohíbe la venta a menores de 18 años, sino la promoción de dichos productos, a excepción de la sidra. A pesar de la nueva legislación, muchos establecimientos siguen ofertando en los carteles o entradas de sus cotillones la posibilidad de disfrutar de una barra libre o de un determinado número de consumiciones. La asociación ha denunciado estas promociones ahora prohibidas. Su abogado ha explicado que muchas familias acuden acompañados de menores, lo que agravaría la situación. «Es una cuestión de salud. Lo que se pretende hacer con esta normativa es que la gente joven deje de beber», ha afirmado Fanjul.

Aún así, ha reconocido que muchas discotecas y salas de fiesta se han puesto las pilas y están cumpliendo con la normativa en sus ofertas. Han dejado de publicitar las bebidas alcohólicas que el cliente tiene derecho a consumir y tan solo ponen el precio de la entrada «y lo demás ya se intuye».