Nueve de cada diez incendios de la oleada de diciembre de 2015 fueron intencionados

Efe OVIEDO

ASTURIAS

El consejero de Presidencia, Guillermo Martínez, comparece en la Junta General del Principado.El consejero de Presidencia, Guillermo Martínez, comparece en la Junta General del Principado
El consejero de Presidencia, Guillermo Martínez, comparece en la Junta General del Principado ARMANDO ÁLVAREZ

El consejero de Presidencia ha destacado la respuesta «ágil y coordinada» del servicio de emergencias en una situación excepcional que arrasó más de 16.000 hectáreas, con 573 focos diferentes.

24 ene 2017 . Actualizado a las 14:37 h.

La oleada de incendios que durante los últimos días de diciembre de 2015 conmocionaron Asturias ha vuelto a la actualidad. La Junta General ha puesto en marcha las comparecencias de la comisión de investigación que trata de averiguar si se produjo alguna negligencia. En la primera sesión han comparecido el consejero de Presidencia, Guillermo Martínez, y el director general de Montes, José Antonio Ferrera. Martínez ha destacado la extensión y la virulencia de las llamas y el hecho de que más del 90% fueran intencionados. Al margen de la situación excepcional a la que se enfrentaron, ha defendido el rápido despliegue de medios efectuados por los servicios de emergencia. A posteriori, las Brigadas de Investigación de Incendios Forestales han llegado a emitir hasta 56 informes de investigaciones, de los que seis terminaron en la Fiscalía. Ferrera, por su parte, solo ha reconocido un error en la comunicación al incrementar el nivel de alerta. Pero no cree que este fallo haya afectado al desarrollo de los acontecimientos.

La información del consejero 

Guillermo Martínez, ha asegurado que la actuación de los servicios de emergencia del Principado durante los incendios forestales de 2015 fue «ágil y coordinada ante una situación de carácter excepcional con unos incendios virulentos más propios de la zona mediterránea», y de los que el 91% fueron intencionados. Martínez ha realizado estas declaraciones durante su comparecencia en la Comisión parlamentaria de investigación de la oleada de fuegos que en diciembre de 2015, cuando se contabilizaron 573 incendios con una superficie afectada de 16.055 hectáreas, el 36% de los incendios registrados ese año.

A preguntas de los grupos parlamentarios, ha destacado el «amplio despliegue» y «la rápida actuación» desarrollada por los servicios de emergencia ante el «desafío» que supone este nuevo tipo de incendios vinculados «a los cambios demográficos y usos de terreno del medio rural». El consejero ha argumentado la excepcionalidad de la situación señalando que en las dos últimas décadas la media estadística arrojaba cincuenta incendios en diciembre, con una superficie afectada de 190 hectáreas, cuando sólo en 2015 se quemaron más de 16.000 en un mes que además es considerado como de «peligro bajo». No ha cifrado los gastos que ha supuesto para el servicio de emergencias el trabajo realizado para la extinción de estos incendios, aunque ha indicado que hubo un coste de 100.000 euros en el pago de horas extraordinarias.

El consejero ha anunciado que «pronto», durante este año, se realizará una nueva adaptación del Plan de Incendios Forestales del Principado de Asturias (INFOPA), que desde su aprobación en 2001 se ha activado en 27 ocasiones. Ha señalado que el INFOPA «es un plan de acción no de prevención» y que «en ningún caso se dejó de actuar ante esa ola de incendios que evolucionaron de una manera rapidísima».

Durante su intervención, Martínez ha desvelado que el 91% de los incendios forestales registrados en diciembre de 2015 en Asturias fueron intencionados, según los 56 expedientes emitidos por las Brigadas de Investigación de Incendios Forestales (Bripas). Martínez ha apuntado que de estos 56 informes de investigación, seis se remitieron a la Fiscalía de Medio Ambiente del Principado, cuatro de ellos realizados conjuntamente con la Guardia Civil. En total se investigaron 9.343 hectáreas, el 74,03 por ciento de la superficie total quemada entre el 19 de diciembre y el 3 de enero. En relación a las motivaciones de los incendios investigados por las Bripas, 29 fueron para la generación de pastos (57%), cinco por eliminación de matorral y residuos agrícolas, uno por un incendiario y otros quince motivos sin constar una causa evidente

El consejero, que ha manifestado la voluntad del Gobierno de colaborar con la comisión de investigación, ha considerado esta oleada de incendios como «una situación de carácter excepcional con una multitud de factores coincidentes en el tiempo que agravaron las consecuencias y la duración temporal del episodio». «Como consejero tomé las decisiones que creí más oportunas para hacer frente a la emergencia declarada, activando los protocolos requeridos y movilizando todos los recursos disponibles con dos objetivos prioritarios: la protección de las personas y los bienes y la minoración de la destrucción de masas forestales», ha afirmado Martínez.

Ha subrayado que estos 16 días ha sido el periodo de alerta más largo al que se haya enfrentado los servicios de emergencia del Principado, a los que ha agradecido su labor, como a todos los demás efectivos de protección que actuaron, en especial, ha recordado a José Antonio Rodríguez, piloto de helicóptero fallecido cuando trabajaba para extinguir un incendio en Parres. El día que mayor número de medios humanos fue el 28 de diciembre, con cerca de 430 personas participando en las labores de extinción. «La situación a las que nos enfrentamos superó cualquier previsión o escenario, no solo por la gravedad y virulencia de incendios como el de Brañalibrel sino también por la simultaneidad y profusión de fuegos y múltiples focos en diferentes puntos de Asturias, como ocurrió el día 20 de diciembre cuando llegaron a registrarse un máximo de 133 incendios activos», ha recalcado.

Por su parte, el director general de Montes, José Antonio Ferrera, perteneciente a la Consejería de Desarrollo Rural, ha reconocido en sede parlamentaria que hubo «un error claro» al no comunicar al SEPA el cambio del nivel 3 al 4 de riesgo de incendio por quemas controladas, del día 18 al 19 de diciembre de 2015, por un fallo en el envío del correo electrónico. No obstante, ha apuntado que ninguno de los incendios registrados en esa fecha tuvieron que ver con episodios de quema controlada, por lo que ha subrayado que el «error no tuvo ninguna trascendencia».

Por último, Ferrera ha asegurado que los planes de emergencia «funcionaron correctamente» y ha destacado la coordinación que hubo con los servicios de emergencia del SEPA, con la toma de decisiones «acertadas» ante la excepcional situación.