El cocinero José Andrés se erige en rostro visible de la resistencia mientras Breitbart señala un acto en Oviedo para reconocer a Vox como legado de la «Alt Right» en España
02 feb 2017 . Actualizado a las 05:00 h.Polarización. La división creada en el seno de la sociedad estadounidense es una de las características que ha marcado el comienzo del mandato de Donald Trump apenas en las dos primeras semanas desde que pasara a ser presidente electo. Algunas de sus medidas más polémicas, desde la construcción de un muro en la frontera de México, al veto a la entrada de emigrantes (algunos de ellos con la tarjeta regular de residencia) procedentes de varios países musulmanes, ha desatado una oleada de protesta y una no menor crisis institucional. Esa polarización ha afectado a la opinión pública más allá incluso de la sociedad norteamericana y ha tenido repercusión en el seno de la Unión Europea; también, incluso, con protagonistas asturianos.
Una de las caras más visibles de la oposición cívica a Trump es la del cocinero asturiano José Andrés Puerta, natural de Mieres, que emigró a EEUU en 1990 «con apenas 50 dólares en el bolsillo y un juego de cuchillos» pero que hoy se ha convertido en un referente gastronómico en el país y que ya durante la campaña electoral participó en mítines de Hillary Clinton para denunciar el tono xenófobo de muchos de los mensajes del candidato republicano. Esta semana, después del veto a los emigrantes aprobado por la Casa Blanca, el Washington Post le ha dedicado un reportaje en el que el cocinero asturiano --que obtuvo la ciudadanía estadounidense en 2013-- reclama que los conservadores nortemericanos reconozcan las aportaciones que los trabajadores «sin papeles» hacen a EEUU, incluso pagando un buen monto en impuestos indirectos. «Dadles permisos de trabajo, dadles un camino hacia la ciudadanía», pide José Andrés en el reportaje del Washington Post mientras señala que «no podemos hacer una ley que implique que todos ellos con malos». El cocinero destaca además el efecto que tendrán estas deportaciones en la industria hostelera que, según indica, podría perder hasta el 9% de sus trabajadores mientras lucha por encontrar empleados cualificados.
Pero si un mierense se ha convertido en rostro de la resistencia a Trump, ha sido un acto celebrado en Asturias el que ha permitido al periódico del asesor del presidente Steve Bannon (autodefinido como Darth Vader de la Casa Blanca), el diario Breitbart dar carta de legado en España del «trumpismo» a Vox. La formación presidida por Santiago Abascal presumió de hecho de participar en la cumbre de formaciones euroescépticas y calificadas como «Alt Right», la nueva denominación de grupos de ultraderecha a ambas orillas del Atlántico.
La agrupación de Vox en Asturias emitió este miércoles un comunicado en el que se hacen eco de la repercusión en Breirbart de una conferencia celebrada en Oviedo por parte de Ortega Lara en la que el diario de Bannon carga contra Mariano Rajoy al que acusa de haber dejado a España «abandonada a la izquierda» y en la que afirma que esto ha provocado «una crisis moral y económica» en el país. La nota de Vox presume de que «la revista dirigida por Steve Bannon, actual consejero principal del presidente estadounidense y jefe de campaña de Trump, apunta a Vox como el partido de futuro en España» y acusa al gobierno del PP de relegar «su obligación de vigilar que la educación no sea monopolio de los comunistas» (aunque el original de Breitbart no cita expresamente a comunistas sino «left wing indoctrination» --adoctrinamiento izquierdista--).
Trump se ha marcado a la UE como uno de sus enemigos y mostrado de diversas formas su apoyo a partidos euroescépticos. En este sentido la nota de Vox Asturias cita a su presidente Santiago Abascal para señalar que «no tememos una desaparición de la actual burocracia Europea, para que surja la Europa de las personas libres» y celebra también la participación del partido en la cumbre celebrada en Coblenza junto al «Frente Nacional francés, la AfD alemana y el Partido de la Libertad holandés, con los que comparte alguno de sus planteamientos y discrepa en otros».