«Mucha gente cree que matar a una prostituta no es violencia de género»

Pilar Campo OVIEDO

ASTURIAS

Graciela Atencio
Graciela Atencio Youtube

La investigadora Graciela Atencio ha documentado más de 800 casos de violencia contra las mujeres en España y pide más sensibilidad social para erradicar los asesinatos por razón del género

10 mar 2017 . Actualizado a las 05:00 h.

Graciela Atencio (Argentina, 1968) es una activista muy comprometida en la lucha por los derechos humanos de las mujeres. Fundadora y directora de Feminicidio.net realiza, desde hace siete años, una ingente labor de documentación de los feminicidios en España y América Latina, pese al escaso apoyo institucional. Reniega de que las víctimas puedan considerarse números en la estadística oficial y recalca la necesidad de trasladar a la sociedad que detrás de cada mujer asesinada hay siempre una filiación y una vida truncada por la violencia machista. Hoy viernes, participará a las 18.30 horas, en el Manglar, ecosistema cultural en Oviedo, en las jornadas Feminicidio Europeo organizadas por Izquierda Unitaria Europea y Podemos.  

-¿Cuántos casos de feminicidio tiene documentados?

-Desde que empezamos a documentar los feminicidios en España, en el año 2010, tenemos más de 800 casos de mujeres asesinadas. En la base de datos documentamos todos los casos de mujeres asesinadas, no sólo en el marco de la pareja, que son el 86%, sino también los que se producen en la prostitución,  los infantiles y los familiares. Tenemos registradas más de 30 niñas de menos de 16 años asesinadas y casos de hombres que, además de matar a sus mujeres, asesinan también a sus suegras.

-¿Cómo clasifica los tipos de feminicidio?

- El feminicidio es un asesinato de una mujer por razón de género. En España hay registrados siete tipos de feminicidios y tres tipos de asesinatos en manos de hombres. Si uno coge la ley integral del año 2004 verá que sólo recoge los casos oficiales en el marco de la ley, cuando, por el contrario, en nuestra base de datos representan el 54 por ciento de los casos. Son violencias machistas que acaban en feminicidios y el resto son invisibilizados.

-¿Sus estudios tienen eco institucional?

-Hay una limitación fuera de los casos oficiales, por lo que recabamos informaciones de hemeroteca. Hacemos estudios de sentencias y seguimiento de la situación de la justicia. Este tipo de proyectos sirven para trabajar en la prevención y en la sensibilización porque no somos conscientes en las sociedades patriarcales, y España no deja de serlo, del horror, de la realidad en torno al asesinato de las mujeres por el hecho de ser mujeres. Es un fenómeno de un calado y un impacto muy brutal que está en parte invisibilizado. Los medios de comunicación, las autoridades y la sociedad se niegan a aceptar que tenemos que ponernos manos a la obra para acabar de erradicar la violencia hacia las mujeres.

-¿Qué deducciones ha obtenido en sus estudios?

-Los medios de comunicación cuando se refieren a las muertes por violencia de género solamente visibilizan las muertes en el marco de las parejas o exparejas y, como las otras violencias no están reconocidas, cuando un hombre asesina a una prostituta la información que se facilita es escueta y muy básica. Y ni siquiera las víctimas tienen nombre. A diferencia de las otras mujeres, es como si hubiera una jerarquía en el tipo de asesinato y eso es muy grave, porque parecería que estamos generando en la sociedad una falsa idea de lo que es la violencia de género, porque  mucha gente cree que matar a una prostituta no es violencia de género. Y las autoridades responden a esa idea y, salvo en Euskadi y Cataluña donde sí ha calado el feminicidio, hay una resistencia institucional a reconocer la otra violencia contra las mujeres y espero que esto se vaya a cambiar.

-¿Cómo valora las sentencias en casos de violencia machista?

- Hemos realizado estudios comparativos de  la situación de la justicia y las sentencias en casos de asesinatos de prostitutas y asesinatos de mujeres en el marco de la pareja o expareja entre los años 2010 y 2015 y las muertes de prostitutas se han saldado con cinco años menos de condena. Y en un estudio sobre la situación de la justicia es preocupante que los mismos jueces y juezas crean en el mito de las denuncias falsas. En  muchos partidos judiciales y en muchas comunidades autónomas los jueces creen en ese mito porque no conceden las suficientes órdenes de protección o archivan denuncias. Tenemos una media de un 40% de órdenes denegadas. Es una justicia patriarcal que también es cómplice de los obstáculos que tenemos para erradicar la violencia machista y tenemos que conseguir que haya jueces y juezas más sensibilizadas en este tema para creer en la justicia. El año pasado, el 35% de las mujeres que habían denunciado fueron asesinadas en el marco de la pareja.

-¿Es necesario celebrar un día internacional de la mujer y manifestarse?

-Tanto el movimiento feminista como la sociedad civil organizada o los defensores de Derechos Humanos que trabajamos en el tema de la violencia contra las mujeres demandamos que los estados e instituciones se ocupen de prevenir, sensibilizar y erradicar todas las violencias machistas. No son excluyentes. ¿Por qué no podemos celebrar nuestros logros? La revolución y los derechos de las mujeres son los derechos generales que más han avanzado en los últimos cien años. Puede ser una reivindicación para exigir todos los derechos que todavía nos faltan por alcanzar y al mismo tiempo una celebración de que la lucha tiene que ser con alegría. Las nuevas generaciones también celebran, reivindicar es celebrar.

-¿Cómo vivió la muerte de los menores, ayer, en Guatemala cuando protestaban contra las agresiones sexuales?

-Convivimos con la barbarie machista como si estuviera normalizada. A medida que avancemos y que podamos conseguir a nivel social y educativo no aceptar actos bárbaros como este va a haber cambios reales. El hecho de que haya ocurrido un 8 de marzo nos tiene que hacer reflexionar del camino que aún nos queda por recorrer para que se acabe la barbarie de la violencia machista. No es casualidad tampoco que haya ocurrido en un país con las tasas más altas de feminicidio. Las menores reivindicaban su derecho a no ser víctimas de agresiones sexuales y maltrato institucional. Es una barbarie y una llamada de atención a nivel global. Esta es una lucha global, si los movimientos sociales y feministas nos uniéramos podríamos exigir justicia ante situaciones como ésta.

-Habrá que empezar por condenar manifestaciones como las del eurodiputado polaco Janusz Korwin-Mikke en la Eurocámara.

- Hay una reacción patriarcal frente a la igualdad de las mujeres y una parte de los hombres reacciona de manera violenta porque no acepta la igualdad de las mujeres.

-¿Cómo se contrarresta?

-La educación es el mejor antídoto. Hay que educar a los niños y niñas en igualdad desde que empiezan a socializarse, desde  los tres años.

-¿Qué le parece la campaña de Hazte oír?

- No hay que sentir rechazo a la diversidad. Hay personas que tienen otra identidad sexual y tenemos que respetarnos en la diversidad, donde no haya rechazo hacia el otro porque el otro sea diferente.

-¿Es necesario implantar el lenguaje de género?

-El lenguaje forma parte de lo que denominamos la violencia simbólica cuando hay vejaciones o discriminación. Es un tipo de violencia que nos afecta a las mujeres y por eso reivindicamos el lenguaje inclusivo, que reconozca al género femenino y no se centre en el genérico masculino.