Los padres boicotean la encuesta contra el ciberacoso escolar del Principado

Susana D. Machargo REDACCIÓN

ASTURIAS

Un aula vacía
Un aula vacía PEPA LOSADA

La Federación Miguel Virgós denunciará el test ante la administración y exigirá su retirada. Critica la intromisión en su vida privada y la cesión de datos a entidades privadas

20 abr 2017 . Actualizado a las 20:05 h.

Los padres de la escuela pública exigen la anulación inmediata de la encuesta contra el ciberacoso escolar que el Principado ha puesto en marcha. La Federación de Padres Miguel Virgós denunciará esta investigación ante la Consejería de Educación y exigirá que se anule. Pero hasta que esto suceda, adopta una medida preventiva. Recomienda a todas las familias que firmen su oposición al test y que no consientan a sus hijos que lo cumplimenten. El colectivo considera que es «totalmente inadmisible» el procedimiento elegido por la administración. El veto se suma así a la denuncia lanzada la semana pasada por el sindicato ANPE, que también habló de llevar el tema ante la Agencia Española de Protección de datos.

El listado de agravios es largo. Las familias denuncian preguntas que suponen una intromisión en la vida privada, el tratamiento de datos por entidades privadas, la obtención de información sensible,... Nada de lo que han visto les gusta. Ni siquiera el procedimiento y las fechas elegidas. Creen que se la han intentado colar el último día antes de las vacaciones de Semana Santa. Como la fecha máxima de entrega es el 5 de mayo, apenas hay tiempo para informar y para devolver la circular con el «no consentimiento». La carta íntegra con los razonamientos está colgada en su web. Anima a sus asociaciones en los colegios a informar.

La base del veto 

La FAPA Miguel Virgós se carga de argumentos. En primer lugar, considera que se ningunea a los padres y a los tutores legales de los estudiantes, que en su mayoría son menores de edad. El cuestionario no solicita el consentimiento expreso de los padres una vez que han sido informados. Más bien sucede lo contrario. Se limita a decir que si no están de acuerdo que lo comuniquen mediante un escrito. Así lo explica la circular que les ha llegado. Lo que sucede es que las familias no saben qué es exactamente esa encuesta contra el ciberacoso. La asociación denuncia que la carta carece de información descriptiva sobre los contenidos.

Hay otros aspectos que les resultan preocupantes. Genera alarma que el alumnado tenga que acceder al cuestionario desde la web pública de Educastur, cuando en realidad las preguntas están alojadas en un servidor no oficial. «Recogerá datos muy sensibles de menores de edad que, además, se ponen en manos de una entidad privada -Universidad Internacional de la Rioja-, ajena a la Consejería de Educación», alertan los padres. Esos datos sensibles son, por ejemplo, «manifestaciones sobre asuntos que podrían ser perseguibles incluso penalmente», advierten, ya que se hacen preguntas sexuales, sobre amenazas, difamación, haceko informático, intromisión en el honor, omisión del deber de socorro, difusión de imágenes,...

La encuesta está llena de pregunta subjetivas que no gustan a la FAPA Miguel Virgós. Precisa que incluye valoraciones sobre si los estudiantes están a gusto en el colegio, si tienen problemas con los profesores,... Pero también hay cuestiones de su vida privada, como si sus padres o tutores les tratan bien, si les dan dinero suficiente y si les dedican el tiempo necesario. El colectivo cree que podría ser una intromisión.

Incluso temen que se creen clasificaciones de centros. Lo explican. Los alumnos no tendrá que poner su nombre en el cuestionario pero sí identificar el centro. Esto supone que se podrían hacer ránkings posteriores.