La reforma electoral asturiana, aplazada hasta el cambio de la ley estatal

EFE REDACCIÓN

ASTURIAS

PACO RODRÍGUEZ

El Congreso de los Diputados emitirá su dictamen de actualización de la normativa a finales de año. PSOE, IU y Ciudadanos acuerdan la suspensión en la Junta General

30 may 2017 . Actualizado a las 19:11 h.

La tramitación de la reforma de la ley electoral autonómica impulsada por PSOE, IU y Ciudadanos en la Junta General ha quedado aplazada hasta que no se resuelva el proceso abierto en el Congreso de los Diputados para modificar esa normativa a nivel estatal, según han informado a Efe fuentes parlamentarias. Este acuerdo entre los tres grupos proponentes se ha alcanzado antes de la reunión que esta tarde tenía previsto celebrar la ponencia encargada de su tramitación, que ha quedado suspendida.

El Congreso puso en marcha en marzo una subcomisión de estudio para la reforma de la ley electoral que aborde la actualización de la normativa electoral y tiene previsto emitir a final de año un dictamen que se elevarán a la Comisión Constitucional para que debata y apruebe las posibles modificaciones legislativas.

En el caso de Asturias, después de que la reforma se paralizase la pasada legislatura ante el rechazo del PSOE a sacarla adelante sin el PP, los socialistas pusieron como requisito que su aprobación contase al menos con el respaldo de tres quintos de la Cámara (27 escaños) lo que hacía imprescindible que a los votos de los partidos que la impulsan se sumasen los de los populares o los de Podemos.

El pasado mes de abril PSOE, IU y Ciudadanos intentaron desbloquear el proceso con el traslado al resto de partidos de una nueva propuesta para modificar el reparto de escaños previsto que atienda las recomendaciones de los servicios jurídicos de la Junta.

La nueva formulación de dos artículos de la iniciativa contemplaba que el decreto de convocatoria de elecciones especificase que los diputados a elegir son 45, de los que 35 corresponderían a las circunscripciones existentes hasta ahora (oriental, central y occidental).

Los diez escaños restantes pasarían a formar parte así de una denominada «circunscripción autonómica» y se asignarían «en función del resultado global obtenido» en el conjunto de Asturias.

El último informe de los servicios jurídicos de la Junta cuestionaba el contenido de la «autoenmienda» planteada por los grupos proponentes en relación tanto al sistema electoral como a la redistribución de escaños que se planteaba en la redacción inicial.

Además, PSOE, IU y Cs planteaban también modificar el artículo relativo al desbloqueo de las listas electorales que permitía a los votantes, de manera opcional, marcar una serie de votos preferenciales dentro de la lista del partido al que vote.

Hasta entonces se preveía que aquellos candidatos que superasen un umbral del 5 por ciento sobre el conjunto de sufragios del partido pasarían a ser elegidos de manera preferente --posibilidad de la que quedan excluidos los cabezas de lista--, porcentaje que con la nueva enmienda se elevó hasta el diez por ciento.

La iniciativa cuenta con la oposición de PP y Foro, que defienden mantener el actual sistema de circunscripciones mientras que Podemos ha calificado de «esperpento» el proceso seguido para aprobar una ley que no incluía aspectos como el voto electrónico, la sustitución de diputados o la obligatoriedad de primarias en los partidos al colisionar con la normativa estatal vigente.

La postura de populares y foristas llevó a IU a plantearse incluso la posibilidad de retomar la propuesta de circunscripción única dado que el intento de acercarse a ambas formaciones renunciando a esa propuesta no había dado ningún resultado.