Meteorología apunta, con cautela, que el verano será más cálido de lo normal. Los indicadores de precipitaciones son más confusos. Oviedo registra la primavera más soleada
21 jun 2017 . Actualizado a las 13:57 h.El delegado de la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet) en Asturias, Manuel Mora, ha hecho balance de los datos que ha arrojado la recién finalizada primavera 2017 y ha anunciado algunas predicciones para el verano que ha entrado el 21 de junio a las 6.24 de la mañana. Mientras que la primavera ha sido «muy cálida y seca» en Asturias a nivel trimestral, Mora destaca que la ola de calor que se está viviendo estos días en la región no es «excepcional», sino que se trata de un fenómeno frecuente en esta época del año. Es más, los datos que maneja le hacen entrever que este será un verano más caluroso de lo normal.
Mora ha señalado que el mes de mayo ha sido el que más días de tormenta (uno de cada dos) ha dejado a su paso desde que hay registros (1981), además de tratarse también del mayo con la temperatura media más alta en las estaciones del Aeropuerto de Asturias y en El Musel, desde que se recogen datos. Aemet califica de «normales» los niveles de precipitaciones obtenidos en marzo y mayo, mientras que en abril ha habido «un tercio de déficit», especialmente en la parte oriental de Asturias. En marzo no ha registrado lluvias intensas mientras que mayo, por contra, ha estado plagado de fuertes lluvias puntuales. En datos generales, la primavera 2017 ha terminado con un déficit de precipitaciones de entre un 25 y un 30% con respecto a los niveles normales en Asturias. Desde el inicio del año hidrológico -el 1 de octubre- ha habido un 15% menos de precipitaciones en relación a la media.
Según el delegado de Meteorología, ha sido «la sexta primavera más cálida y la séptima más seca desde que hay registros». Ostentan aún el récord el periodo primaveral de 2011, si bien la de este año ha superado en cuanto a calor y sequía meteorológica el mismo trimestre de los años 2015 y 2016. Ha habido otros datos curiosos. En Oviedo ha sido «la primavera más soleada desde que hay registros» debido, entre otros factores, al escaso viento procedente del oeste que suele traer la nubosidad y las precipitaciones del Atlántico. Por eso, el cuadrante noroeste de la Península Ibérica ha sido el que ha vivido una primavera especialmente más seca de lo normal.
¿Cómo será el verano?
Para el verano que se avecina, Manuel Mora, aunque recuerda que deben ser «cautos a la hora de sacar conclusiones» y que «las predicciones no son demasiado fiables», se prevé un trimestre con una «mayor probabilidad de que haya temperaturas por encima de lo habitual». En cuanto a las lluvias, subraya que «algunos indicadores predicen más precipitaciones de lo normal; otros, en cambio, menos» y que «lo normal en los meses estivos es alcanzar una media de 7 días lluviosos por mes». De todas formas, las predicciones que barajan no presentan «anomalías» remarcables para este verano.
Para los próximos días, tras haber activado el aviso amarillo por altas temperaturas en los valles mineros por alcanzar temperaturas entre los 34 y los 36 grados centígrados, se prevé un descenso notable de las temperaturas debido a que el viento virará y soplará con una variante oeste predominante que traerá nubosidad, probables lloviznas en la costa y un descenso de temperaturas de hasta 8 grados en los concejos de las Cuencas. El fin de semana, incluso, presenta la posibilidad de tormentas fuertes y precipitaciones significativas. No obstante, todos estos fenómenos entran dentro de los «valores normales para la época» según Mora.