Imprudencias, venganzas y regeneración de pastos: estas son las causas de incendios en Asturias

S.D.M. REDACCIÓN

ASTURIAS

DANIEL GAYOSO

La Guardia Civil detalla los 20 casos que ha esclarecido a lo largo de 2017

17 oct 2017 . Actualizado a las 11:18 h.

Imprudencias graves en la quema de rastrojos. Fuegos provocados para regenerar pastos. Hasta actos intencionados de venganza. Estas son las principales causas de los incendios forestales investigados en Asturias durante los cinco primeros meses de 2017. La gran mayoría son intencionados. Del total, la Guardia Civil ha conseguido esclarecer una veintena ocurridos en 16 concejos y ya tiene una nómina amplia de investigados y detenidos. Uno de ellos se registró en un terreno de gran valor ambiental, en concreto en la reserva de la biosfera de Somiedo. Así consta en una respuesta del Gobierno a una pregunta presentada por la senadora de Foro Rosa Domínguez de Posada, sobre las actuaciones desarrolladas por las fuerzas de seguridad. 

De los 20, hay uno muy diferente al resto. Es precisamente el que ardió en la reserva de la biosfera de Somiedo. No es una casualidad que haya sido en terreno protegido. La Guardia Civil ha llegado a la conclusión de que era intencionado, por venganza contra la administración por la gestión del espacio natural. El investigado es un ganadero con antecedentes, que quemó monte en un área crítica para el oso pardo.

El resto de los focos

La causa más común es el fuego intencionado para la regeneración de pastos. De los 20 casos que han aflorado, ese es el origen en diez de ellos, que devoraron hectáreas de suelo en Tineo, Somiedo, Pola de Allande, Grandas de Salime, Cabrales, Parres, Gijón, Ribadesella, Piloña y Onís. Algunos de estos focos afectaron a más de un término municipal. Las pesquisas de la Guardia Civil han permitido acercarse a once investigados y practicar una detención. Todos han sido señalados como ganaderos. Hubo un fuego intencionado más, que se produjo en el concejo de Onís. Pero en esa ocasión el motivo por el que prendió fuego fue un acto de vandalismo.

La imprudencia grave en la quema de rastrojos para limpiar fincas, unas veces con permiso y otras sin la autorización, es la segunda causa detectada. Así sucedió en incendios forestales ocho de los investigados desde enero de 2017. La mayoría son propietarios de fincas que están adecentando sus parcelas. Pero en uno de los casos se trató de un operario de un tractor forestal que no actuó con la adecuada diligencias mientras realizaba las tareas de desbroce. Este de fuegos se produjeron en Tineo, Cangas del Narcea, Teverga, Aller, Salas, Gijón, Cangas de Onís y Corvera. Hubo una detención en un caso de imprudencia. Fue el caso de un ganadero jubilado de Teverga que quemó rastrojos de su finca sin permiso en la reserva de la biosfera de Las Ubiñas-La mesa. 

Algunos de estos fuegos fueron pequeños focos. En ocasiones, como uno en Tineo, apenas ardieron 100 metros cuadrados de monte bajo. Pero en otros la extensión fue considerable. Ese es el caso de un foco que se originó en la zona de Buspol y que se extendió por Pola de Allande y Grandas de Salime, arrasando 160 hectáreas de terreno repoblado, pinos y monte bajo. Los agentes han llegado hasta dos investigados.