Denuncian los estrictos controles que la Policía realiza sobre los buses que se dirigen a Oviedo para participar en la manifestación de La Escandalera, coincidiendo con los premios Princesa
20 oct 2017 . Actualizado a las 13:52 h.Paran los autobuses a la salida de las ciudades, los desvían hacia áreas de servicio o gasolineras, bajan a los pasajeros y, uno a uno, los registran e identifican. Ese proceso puede durar hasta una hora. Las Marchas de la Dignidad han denunciado los problemas que están encontrando los autobuses que ahora mismo viajan hacia Oviedo para participar en la manifestación programa para esta tarde en la plaza de La Escandalera de Oviedo, coincidiendo con la ceremonia de entrega de los premios Princesa de Asturias 2017. En concreto, han sido sometidos a estos estrictos controles los convoyes procedentes de Galicia y País Vasco. Lo curioso es que han sido detenidos más de una vez durante el trayecto. No tienen constancia de que hayan tenido problemas los que viajan en vehículo particular ni tampoco los que llegan en transporte público. La única comitiva organizada que no ha dado señales de vida es la de Valladolid, por lo que los organizadores entienden que su viaje está discurriendo con normalidad.
El objetivo de la protesta, que ya se ha convertido en un clásico, es mostrar su rechazo a unos galardones que permiten «desfilar por la alfombra roja de la opulencia a los responsables de los desahucios y los causantes de la crisis amparados en el régimen monárquico del 78 y lavar su imagen con el prestigio de los premiados». En esta edición hay, además, un aliciente extra. Las Marchas de la Dignidad quieren mostrar su rechazo al galardón de la Concordia a la Unión Europea. Consideran que es «una provocación y una desvergüenza», ya que se concede un premio que debería distinguir la solidaridad y la igualdad a un organismo que «hace justo lo contrario y asfixia a los pueblos para pagar la deuda». Los millones de refugiados que esperan al borde de la frontera de la UE son otra de las imágenes que traen consigo a esta protesta.