La última borrasca del año deja ráfagas de 126 kilómetros por hora en Ibias. Solo en Estaca de Bares las rachas son mayores
26 dic 2017 . Actualizado a las 21:19 h.Se llama «Bruno» y comienza a hacer efectivas las previsiones. Las ráfagas del último temporal del 2017 en Asturias ya superan los 100 kilómetros por hora. En concreto, en San Antolín de Íbias se han registrado golpes de viento de hasta 126 kilómetros por horas, alrededor de las seis de la tarde, y en cabo Busto, de hasta 119 kilómetros por hora, después de las ocho. El único punto de toda España con rachas peores es Estaca de Bares, en Galicia, donde se han registrado hasta 133 kilómetros por hora.
Bruno no llega solo envuelto en viento. Además, la boya de Puertos del Estado situada frente a cabo Peñas está registrado oleaje con una altura superior a los cinco metros. Es necesario el uso de cadenas en seis puertos de montaña (Leitariegos, Cerredo, Conio, Tarna, Somiedo y Ventana), tal y como indica la web del Servicio de Emergencias del Principado, a las nueve y media de la tarde. Las condiciones seguirán empeorando a medida que caiga la noche. La Agencia Estatal de Meteorología (Aemet) mantiene activa la alerta naranja por viento, nieve y fenómenos costeros en prácticamente toda la región.
La cota de nieve bajará hasta los 800 metros en la cordillera, donde el viento también podrá superar los 110 kilómetros por hora. El olaje podrá alcanzar los siete metros de altura. En cuanto a las temperaturas, las mínimas irán en descenso en la Cordillera y Picos y sin cambios significativos en el resto de la comunidad. Las temperaturas máximas podrán registrarse en Avilés, Llanes y Gijón, donde los termómetros alcanzarán hasta los 14 grados centígrados.
Por su parte, el Ministerio de Fomento ha activado medios especiales para hacer frente a las nevadas que puedan producirse en Aragón, Asturias y Castilla y León durante el temporal de nieve desde hoy, martes, hasta el jueves. Fomento cuenta con 625 equipos quitanieves y una capacidad de almacenamiento de 117.915 toneladas de fundentes.
Después de Bruno, y conforme a la nueva costumbre adoptada por la Aemet para bautizar las borrascas del Atlántico por orden alfabético, llegará el turno para Carmen, David, Emma, Felix, Gisele, Hugo, Irene, Jose, Katia, Le, Marina, Nuno, Olivia, Pierre, Rosa, Samuel, Telma, Vasco y Wiam.
