Las discotecas presentan menos reclamaciones en Asturias porque aseguran que no sirve de nada
28 dic 2017 . Actualizado a las 05:00 h.A escasos días de una de las mayores fiestas del año, son infinitas las propuestas que tanto discotecas, como pubs o restaurantes proponen para dar la bienvenida al nuevo año. Mientras unos se decantan por una buena cena con cotillón y baile -ya sea con música en directo o con DJ-, otros prefieren comenzar la fiesta después de comerse las uvas y acudir a una de las muchas barras libres que se ofertan en los distintos locales. Pero, ¿hasta qué punto son legales este tipo de celebraciones?¿Saben los asistentes si los recintos a los que acuden cumplen con todas las normativas de seguridad? La Asociación de Empresarios de Salas de Baile, Fiestas y Discotecas de Asturias denuncia que muchas de estas ofertas no cumplen con la reglamentación vigente y, por lo tanto, son ilegales. Los problemas que se encuentran en estas fiestas pirata son los de siempre: la promoción de alcohol y la presencia de música en directo en locales que no disponen de la licencia pertinente. Pedro Fanjul, abogado representante de esta asociación asegura que, además, este tipo de eventos no cumple las medidas de seguridad exigidas, por lo que pueden poner en peligro a los clientes. El número de denuncias interpuestas por las discotecas se mantiene similar al de años pasados aunque su abogado asegura que han llegado a disminuir debido a la indiferencia de la Administración, que no actúa con contundencia.
Pedro Fanjul incide, sobre todo, en la ilegalidad que se comete al ofrecer barras libres en sus promociones. «Este tipo de propuestas van en contra de la ley del Principado», critica el abogado, refiriéndose a la la ley 4/2015 del Principado, de 6 de marzo, que regula la atención integral en materia de drogas y bebidas alcohólicas. Esta normativa prohíbe, no sólo la venta de alcohol a menores de 18 años, sino también la promoción de dichos productos. Dos años después de la creación de esta normativa siguen siendo muchos los locales que cobran un precio determinado por un número indeterminado de copas. Otro de los grandes problemas de estas celebraciones son las licencias para la celebración de actuaciones en directo. «Los locales que tienen licencia para estos eventos tiene que pagar una gran cantidad de dinero, que pierden debido a la competencia de muchos otros que, pese a no cumplir la normativa, ofrecen espectáculos en vivo», asegura Fanjul.
En Oviedo, concretamente, se han presentado varias denuncias contra uniones de pubs. «Tanto en Oviedo, como en Avilés y otros lugares se realizan asociaciones de tres o cuatro pubs que ofrecen barras libres para así duplicar la venta del número de entradas». El problema real surge cuando, fácilmente, tal y como asegura Fanjul se dobla el aforo entre uno y otro local. «La gente se mueve de uno a otro y la capacidad del aforo se incumple constantemente».
Todas estas razones llevan a la asociación a tramitar un gran número de denuncias contra estas fiestas pirata, aunque su abogado asegura que este año el número se ha reducido. Esto se debe a que las discotecas se han cansado de hacer llegar a la administración estas ilegalidades sin recibir ningún tipo de respuesta por su parte. «La administración está consintiendo que durante todo el año los pubs puedan abrir hasta las 9 de la mañana, se excedan en aforo y vendan alcohol a deshora», critica Fanjul. Y en Nochevieja pasa exactamente lo mismo. Según el abogado, cuando las discotecas denuncian un caso de incumplimiento de la legislación por parte de alguno de estos pubs la policía no acude a los pequeños locales, sino que entra a inspeccionar las propias discotecas. «La policía tiene locales protegidos. Van a unos locales y a otros no», denuncia Fanjul.
La solución: «Que todos los locales respeten las licencias de horarios», así lo zanja el abogado. «Es necesario que cuando llega una denuncia se revisen todos los locales a la vez, no únicamente los que les interesa revisar». Fanjul lamenta tal situación, que afecta directamente a la asociación de discotecas y asegura que, a pesar de haber propuesto soluciones en varias ocasiones, la situación tardará mucho en corregirse.