El director general de Tecnologías del Principado advierte de que los ordenadores del sector público asturiano tienen «agujeros de seguridad impresionantes»
20 feb 2018 . Actualizado a las 19:46 h.El director general de Tecnologías de la Información y las Comunicaciones del Gobierno asturiano, Manuel Solla Bárcena, ha explicado este martes que el 90 por ciento de los aproximadamente 27.000 trabajadores de las consejerías del Principado de Asturias trabajan con el sistema informático operativo Windows XP de Microsoft, que está «descatalogado por el fabricante» y con «agujeros de seguridad impresionantes».
El dato y la afirmación han sido ofrecidos por Solla Bárcena en una comisión parlamentaria de la Junta General del Principado de Asturias. Figuran en la relación de una serie de deficiencias a las que, a su juicio, hay que poner solución para evitar males mayores.
Según ha explicado las infraestructuras informáticas del puesto de trabajo de los empleados públicos ya no son sostenibles. «Apunta un grave riesgo por vulnerabilidades de seguridad y costes elevados para su administración», ha señalado.
En relación a los equipos de hardware del Principado de Asturias, Solla Bárcena ha advertido también de una situación de «evidente obsolescencia». En materia de infraestructuras de seguridad, la situación es razonable «de momento», pero considera que se necesitan renovar equipos que permitan la gestión y respuesta centralizada frente a futuros ataques. En este sentido, ha alertado de los ciberataques que cada vez tienen más como objetivo los teléfonos corporativos.
Todos estas observaciones, ha explicado, se incluyen en un documento que ha elaborado su departamento y que ya ha sido entregado al Consejo de Gobierno asturiano. La dirección general ha impulsado un proyecto estratégico de Transformación Digital para el periodo 2017-2022.
Sin embargo, ha lamentado la actual situación de prórroga presupuestaria, que le impide contar con los recursos necesarios. De hecho, hay menos dinero para inversiones que había en 2004 para su departamento.
Considera que la estructura y dimensión de la Dirección General de Tecnologías de Información y las Comunicaciones tiene que adaptarse a los tiempos. «Tiene la misma estructura que hace diez años», ha explicado a los diputados. Considera necesaria la incorporación de unas 30 personas, la mayoría para el departamento de Procesos.