El coañés será trasladado de inmediato al Centro Penitenciario de Asturias. La jueza le atribuye asesinato con agravante de género
12 mar 2018 . Actualizado a las 21:28 h.Tal y como ha solicitado la fiscalía, el Juzgado de Luarca ha decretado el ingreso en prisión, comunicada y sin fianza, de Javier Ledo, acusado de acabar con la vida de la gijonesa Paz Fernández Borrego el 13 de febrero en la localidad asturiana de Navia. En principio la magistrada le atribuye una calificación de homicidio o en su caso de asesinato con agravante de género, que irá desarrollándose durante la instrucción. El hombre será trasladado de inmediato al centro penitenciario de Asturias.
El coañés, que acabó por confesar su crimen según fuentes de la Guardia Civil, compareció ante el juzgado a las ocho de la mañana de este lunes después de las 72 horas de su detención a raíz del hallazgo, el pasado martes en el embalse de Arbón, de los restos de la mujer en una investigación sobre la que por el momento se mantiene el secreto de sumario. Durante la jornada de domingo, los agentes intensificaron la investigación en el embalse donde apareció el cuerpo de Paz Fernández y los domicilios de Javier Ledo y sus padres. Durante los nuevos registros, el detenido estuvo presente, aunque no llegó a bajarse del coche. El resto del día lo pasó en los calabozos de la Guardia Civil. A las diez de esta mañana, el Grupo Especial de Actividades Subacuáticas (GEAS) retomarán la búsqueda en el embalse.
Durante el domingo se registraron a fondo las dos viviendas habituales del presunto autor de la muerte de la gijonesa de 43 años, de las que recabó muestras que fueron remitidas al laboratorio de criminalística. Los agentes contaron con el apoyo de perros adiestrados en la búsqueda y detección de restos biológicos. El detenido el pasado viernes es un conocido de la fallecida que días atrás concedió entrevistas a medios asturianos para asegurar que, pese a que el día de su desaparición estuvo con ella, no tuvo nada que ver con la muerte. El hombre conservaba conversaciones de Whatsapp en las que, según afirmaba, la mujer se mostraba angustiada y preocupada, y aseguraba que el día de la desaparición, el 13 de febrero, la había invitado a cenar a su casa, pero que no acudió.
La mujer, María Paz Fernández Borrego, había reservado el 13 de febrero un hostal en Navia, adonde iba con cierta frecuencia, pero no llegó a dormir en el establecimiento. Al día siguiente, fue encontrado su vehículo junto al hospital de Jarrio, en el vecino municipio de Coaña, a unos catorce kilómetros del embalse donde fue hallado su cadáver, así como su perro suelto por las calles de Navia.
El cadáver fue encontrado flotando sobre las 15:50 horas del pasado martes en una zona de difícil acceso en una orilla del embalse, en las proximidades de un cámping. El cuerpo presentaba múltiples contusiones y un golpe en la cabeza y, aparentemente, había sido lastrado.
