La predicción invita a guardar las sandalias en el amario y comienza a incluir la cota de nieve
05 oct 2018 . Actualizado a las 17:30 h.La atmósfera se está preparando para dar uno de sus habituales giros de 180 grados. El fin de semana regresan a Asturias la lluvia y el frío, con una variación térmica de hasta 15 grados en las máximas. Será necesario rescatar los chubasqueros y guardar en el armario las sandalias. No obstante, todavía es pronto para saber si será algo definitivo. Las mínimas bajarán a valores más típicos de esta época del año que los registrados en las últimas semanas, a pesar de que el otoño comenzó hace 15 días. El domingo, por ejemplo, en Tarna, se desplomarán a 2 grados, según datos recabados del portal eltiempo.es. Además, la cota de nieve comenzará a colarse en los avisos meteorológicos, aunque por el momento los copos solo cubrirá cumbres elevadas. La lluvia también hará acto de presencia.
Hasta entonces, durante las próximas horas las condiciones seguirán siendo veraniegas. Los asturianos podrán disfrutar de unas temperaturas altas. Según la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet), Cangas del Narcea alcanzará este viernes los 28 grados de máxima, por los 23 de Gijón y los 25 de Oviedo. Menos agradables están siendo las temperaturas nocturnas. Las mínimas comienzan a ser bajas, sobre todo en el interior.
Corredor de aire frío
El fin de semana el anticiclón de las Azores se va a desplazar ligeramente hacia el oeste. Al mismo tiempo se va a formar una borrasca que situará su centro de acción sobre Francia. Las altas y bajas presiones crearán un corredor de vientos del norte que se encargarán de transportar hasta Asturias una masa de aire frío. Ese aire gélido provocará un notable descenso térmico, sobre todo de las temperaturas máximas.
Cangas del Narcea, que suele marcar las predicciones más extremas, vuelve a ser el mejor referente. La máxima pasará de los 29 grados previstos para ayer jueves, a apenas 14 el domingo. Es decir, los termómetros se desplomarán 15 grados en apenas dos días, tal y como aparece en la predicción de Aemet. El descenso será menos acusado en las mínimas, que bajarán de 10 a 6. Otro ejemplo con Oviedo: perderá 9 grados en 48 horas, al pasar de 25 grados a 16, entre el jueves y el domingo. Este descenso será menos acusado en el litoral. En el mismo periodo de tiempo, la horquilla en la que se moverá Gijón será de 22 a 18 grados.
Este cambio de tendencia meteorológica también trae consigo la lluvia. El frente dejará lluvias débiles mañan, sábado, que se intensificarán el domingo. De hecho, amanecerá poco nuboso pero aumentará a lo largo del día de oeste a este. En la segunda mitad del día, hará acto de presencia el agua. Primero lluvias, en general, débiles y después chubascos chubascos ocasionales. La cota de nieve descenderá a entre 1600, reconoce la predicción de Meteorología. El domingo el otoño se hará más que presente. Desde primera hora se registrarán chubascos y lluvias persistentes. La cota de nieve bajará a 1.500.
A medio plazo la incógnita reside en saber si este cambio meteorológico es solo algo pasajero o marca un cambio de tendencia, lo cual no sería ninguna sorpresa porque el aire frío de origen polar comienza a tomar el control del hemisferio norte debido a la disminución progresiva de la radiación solar. La respuesta la tiene el anticiclón. Y sobre su evolución los diferentes modelos no terminan de ponerse de acuerdo. El europeo apuesta por una disminución de la influencia del sistema de altas presiones. Esto permitiría que las borrascas asumiesen más protagonismo del que tienen ahora mismo. Pero el modelo americano señala justo lo contrario, un nuevo refuerzo del anticiclón oceánico. Habrá que esperar unos días para saber si finalmente el otoño reclama su espacio o el verano se resiste a abandonar a los asturianos.