El dueño de la antigua Tenneco se ofrece para salvar a la leonesa Vestas

Carmen Liedo REDACCIÓN

ASTURIAS

Planta de Vauste en Gijón
Planta de Vauste en Gijón Vauste

El inversor alemán se ha mostrado dispuesto a adquirir la fábrica de aerogeneradores de Villadangos del Páramos. La propiedad de la planta acuerda con el Ministerio de Industria y sindicatos continuar con la unidad productiva hasta diciembre de 2019

11 oct 2018 . Actualizado a las 16:44 h.

El futuro de la empresa leonesa Vestas oscila entre la continuidad y la llegada de un posible inversor que salve a la fábrica de aerogeneradores. En la jornada de ayer miércoles se abrían ambas posibilidades tras un largo conflicto laboral, y es que mientras por un lado se desvelaba que el fondo de inversión industrial Quantum Capital Partners estaría dispuesto a hacerse cargo de la planta de Villadangos del Páramo, el Ministerio de Industria anunciaba que había llegado a un acuerdo con la compañía danesa propietaria de Vestas y con los sindicatos por el que la planta eólica tendría compromiso de continuidad de la producción hasta el 31 de diciembre de 2019. Esto deja en interrogante el ofrecimiento del inversor alemán de salvar a la factoría leonesa, como ya lo hiciera Quantum en 2016 con la empresa de amortiguadores asturiana que compró a la multinacional americana Tenneco, actualmente denominada Vauste. Este fondo inversor industrial también se hizo cargo en su día de Eltec y Barcelona Cartón y Bosh Clarton Horn.

Estas opciones llegan unos días después de que la dirección y la plantilla de Vestas lograran un preacuerdo para concluir el conflicto laboral. Fue el pasado domingo cuando establecieron una indemnización de 67 días por año trabajado para cada empleado. Mientras, la Fundación Anclaje, dependiente de la Consejería de Empleo de la Junta de Castilla y León, trataba de conseguir un inversor que garantizara la actividad industrial en la zona.

El caso es que el Ministerio de Industria, Comercio y Turismo, los sindicatos UGT y CC OO y la compañía Vestas firmaban un acuerdo en la tarde de ayer miércoles dirigido a paliar el impacto del cierre de la planta eólica. El propio Ministerio de Industria lo anunciaba en una nota de prensa señalando que el objetivo principal era «apoyar la recolocación de los trabajadores de la fábrica y el tejido industrial asociado a la misma». Así, el Marco de Actuación fijado contempla que la administración pública estatal y empresa «se comprometen a realizar sus mejores esfuerzos para lograr inversores industriales antes del 31 de diciembre de 2019». Para ello la propiedad de la factoría se comprometía a «mantener el edificio en condiciones de operatividad hasta el 31 de diciembre de 2019 o hasta la transferencia del mismo a un inversor, lo que ocurra antes», y a mantener la actividad en las fábricas de Viveiro (Lugo) y Daimiel (Ciudad Real), eslabones fundamentales ambas en la cadena global de producción de la empresa, conforme a las actuales condiciones de mercado.

Entretanto, en Castilla y León se desvelaba el nombre del inversor dispuesto a comprar y salvar la factoría de Villadangos del Páramo: Quantum Capital Partners, radicado en Munich (Alemania), un fondo ya conocido en nuestro país tras haberse hecho cargo de otras empresas, una de ellas, la planta de amortiguadores que tenía en Gijón la multinacional americana Tenneco. Con esta factoría se hizo en 2016 tras un largo conflicto laboral, pasando a denominarse VAUSTE Spain S.L.U. Iniciaba un proyecto empresarial enfocado a diversificar la oferta de productos y fabricar componentes para automoción con un alto valor añadido. Entre los compromisos adquiridos cuando se realizó el traspaso estuvo el mantenimiento de  los 117 empleos, así como las condiciones laborales que tenían entonces.