CCOO, Suatea, CSI y CSIF han anunciado una campaña de movilizaciones para forzar la apertura de un nuevo proceso de negociación
11 oct 2018 . Actualizado a las 13:22 h.Los sindicatos de enseñanza de CCOO, Suatea, CSI y CSIF han anunciado un calendario de movilizaciones para abrir un nuevo proceso de negociación sobre la recuperación de la jornada laboral previa a la crisis tras el fracaso del primer intento. El rechazo de UGT y ANPE, con mayoría en la Mesa Sectorial, a la propuesta de la Consejería de Educación de reducir dos horas lectivas semanales para el profesorado de Secundaria y de dos horas complementarias de obligada permanencia en el centro para los maestros provocó la ruptura de negociaciones.
La representante del CSIF Clara Rosa Rodríguez, que ha anunciado que está previsto un encierro el próximo 17 de octubre en el Instituto de Educación Secundaria de Mata Jove, en Gijón, ha llamado a la movilización al profesorado para que realicen «un nuevo esfuerzo». También ha reclamado la participación del profesorado de Secundaria para que se concentren ante sus centros de trabajo en la hora del recreo y ha citado a los maestros a que realicen el mismo tipo de movilización en el día 23 de octubre.
La representante de Suatea, Emma Rodríguez, ha subrayado que el acuerdo frustrado suponía garantizar para el curso que viene las condiciones de trabajo previas a la crisis y ha criticado la escasa disposición a la negociación mostrada por el consejero de Educación Genaro Alonso, durante toda la legislatura.
Por su parte, Borja Llorente (CCOO) y Vicenta Acebal (CSI) han resaltado la necesidad de alcanzar un acuerdo durante este año para que sea plasmado en los presupuestos general del Principado ante la llegada de las elecciones el próximo mes de mayo, lo que, a su juicio, podría dejar en vilo cualquier acuerdo alcanzado sin que tenga el respaldo de una partida en las cuentas de la región.
En relación a la postura de UGT y ANPE, los sindicatos han afirmado que no entienden porqué «no han firmado este acuerdo cuando sus compañeros en otras autonomías han aceptado pactos que contemplaban peores condiciones».
